El puerto de Algeciras dejó entrar 13 contenedores con productos muy tóxicos rechazados en Europa

El puerto de Algeciras ha admitido ante grupos ecologistas de Cádiz lo que negó hace unos días: que había dejado entrar 13 contenedores con productos muy tóxicos -destinados al vertedero de Nerva (Huelva)- que habían sido rechazados en otros puertos precisamente por su peligrosidad. Miembros de la Asociación Gaditana para la Defensa y Estudio de la Naturaleza (Agaden) solicitaron ayer, en sendos escritos remitidos al consejero de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, José Luis Blanco, y al presidente de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras (APBA), Manuel Morón, que se paralicen de inmediato los trabajos de transporte de los 13 contenedores, que llegaron al puerto algecireño el 17 de septiembre vía Grecia e Italia con residuos tóxicos y peligrosos en su interior. Según apuntó ayer Javier Gil, portavoz de Agaden, "en la reunión mantenida el pasado jueves por los miembros del Instituto Municipal para la Conservación de la Naturaleza del Ayuntamiento de Algeciras (Inmucona), un representante de la Autoridad Portuaria confirmó que en el interior de los contenedores existen residuos tóxicos y peligrosos, a pesar de que el pasado 18 de noviembre los responsables del ente portuario aseguraron que no". Por ello, Gil explicó que su grupo ecologista ha solicitado "la paralización del transporte de los contenedores que aún quedan por llevar al vertedero de residuos industriales tóxicos y peligrosos de Nerva en Huelva". "Porque consideramos que no podemos admitir en Andalucía residuos de otros países", dijo. A su juicio, se está abriendo una puerta para que el puerto de Algeciras y el resto de los puertos andaluces en general sean puntos de entrada para todos aquellos desechos que no quiere el resto del mundo". Los 13 contenedores que generaron esta polémica hace varias semanas en Algeciras llegaron a esta ciudad procedentes del Mediterráneo y, según la autoridad portuaria, tan sólo portaban en su interior los restos de un incendio ocurrido a bordo del mismo barco que los transportó. En total 325 toneladas de poliestileno expandido. Para Nerva Ahora los ecologistas afirman que "el tiempo da y quita razones", ya que, según Javier Gil, se ha podido confirmar que "los residuos son de terceros países y en ningún caso pertenecen a empresas que los hayan generado en territorio andaluz". Las informaciones recabadas por los ecologistas indican que los contenedores fueron embarcados en el puerto griego del Pireo, donde fueron rechazados, al igual que en Rotterdam (Holanda), donde la empresa Sealand también intentó colocarlos". Al final, según los ecologistas de Agaden, "se decidió traerlos al depósito de residuos tóxicos y peligrosos de Nerva porque era el vertedero más barato", según aseguran que confirmó el representante del ente portuario. Los ecologistas exigen, además de la paralización del transporte de los residuos a Nerva -una tarea que se inició a principios de este mes y que requiere de una gran lentitud debido a la falta de camiones especiales para dicho traslado-, que los contenedores sean devueltos a la empresa Sealand para que ésta los traslade hasta su país de origen. Los conservacionistas esperan que se dé una respuesta inmediata a sus peticiones una vez se ha comprobado -al menos ellos insisten en que lo han probado- que en el interior de los contenedores existen residuos tóxicos y peligrosos.