Los Reyes abren en Sevilla una exposición y un congreso sobre una fecha que cambió la historia

De Fernando III y Beatriz de Suabia, a Juan Carlos I y doña Sofía: 750 años de la historia de España. Los Reyes inauguraron ayer en el Real Alcázar de Sevilla el congreso y la exposición Metropolis Tutius Hispaniae con el que se recuerda un conflicto bélico precedido de asedio y seguido de conquista que, sin embargo, propició la convivencia de distintas culturas, la llegada de banqueros genoveses y de artistas que pusieron la ciudad en contacto con un arte gótico que desde el valle del Loira -y con escala en Burgos- alcanzó uno de sus más bellos exponentes en la trianera iglesia de Santa Ana.

"1248 es el año de Sevilla". Luis Suárez Fernández, de la Real Academia de la Historia, resaltó en la conferencia inaugural la relevancia de un hecho histórico que hizo de la ciudad "la más rica, la más poblada, la más brillante" de la España del siglo XIII. Una época evocada en un congreso científico y en una exposición antológica que contaron con la presencia de los Reyes de España, que tuvieron tiempo para ver el cuerpo incorrupto de San Fernando, uno de los cuatro días del año que es posible, y subir a la pasarela desde la que se pueden apreciar el Giraldillo y su réplica. El ambiente invitaba a recrear aquel largo asedio que se inició en el verano de 1247. Monseñor Carlos Amigo y los representantes de la curia representaban el espíritu del arzobispo don Remondo; la jerarquía militar, con sus medallas y uniformes, sugerían el peso específico del almirante Bonifaz al frente de la Marina de Castilla, todo un homenaje castrense al realismo mágico. El congreso ha sido inaugurado el 23 de noviembre, mismo día en que, hace 750 años, el Rey Santo entró en Sevilla, como recordó el coordinador de este encuentro científico, el profesor de la Universidad de Sevilla Manuel González, quien dijo que la gesta de Fernando III culminó la conquista del Valle del Guadalquivir. El presidente de la Junta, Manuel Chaves, agregó que la conquista de Sevilla trajo consigo una sociedad "más compleja, diversa y multicultural", y mencionó en su discurso la reciente creación de la Fundación de las Tres Culturas, auspiciada por el Gobierno andaluz, "para construir un futuro de concordia, estabilidad y progreso". La alcaldesa de Sevilla, Soledad Becerril, agradeció a los Reyes su presencia y recordó que San Fernando quedó deslumbrado por la belleza y las dimensiones de Sevilla, por lo que la eligió como residencia, la hizo capital del Reino y "le dedicó sus mejores y más fructíferos esfuerzos".