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35 familias bilbaínas serán desalojadas de sus casas para erradicar la plaga de termitas detectada en 150 viviendas

Alrededor de 35 familias del barrio bilbaíno de Irala tendrán que ser desalojadas de sus casas para erradicar la plaga de termitas que ha afectado en esta zona a cerca de 150 pisos. El Ayuntamiento anunció ayer que sufragará la mitad del coste de las labores de desinfección, que comenzarán a finales de año, "porque es un barrio modesto, donde viven vecinos con rentas bajas y es un problema que hay que atajarlo rápido", afirmó el concejal de Urbanismo, Dimas Sañudo. El responsable municipal presentó los datos del estudio elaborado tras detectarse a finales de septiembre los desperfectos en viviendas de Irala, cuyas vigas debieron ser apuntaladas en algunos casos. De las 21 comunidades de vecinos estudiadas -donde residen cerca de 150 familias-, el 95% de los edificios están afectadas por las termitas y la acción depredadora de estos insectos permanece activa actualmente en el 81%. Además, el 52% de los inmuebles presenta problemas en sus estructuras, que afectan mayoritariamente a los forjados. Durante este mes y medio, los servicios municipales han actuado sobre cinco forjados y han apuntalado otros dos más. Dimas Sañudo desveló las próximas actuaciones municipales: se encargará otro estudio en 60 edificios más del barrio que se asientan sobre estructuras de madera y se declarará área de rehabilitación integral a todos estos inmuebles, 81 en total, "lo que permitirá una financiación mejor de las obras estructurales". "Las ayudas proceden del Gobierno vasco, con quien ya hemos hablado y tiene buena disposición. Llevará más tiempo, unos seis meses. En Bilbao La Vieja, donde se ha logrado esa declaración, las ayudas han llegado a suponer el 70% del coste de rehabilitación", dijo. La actuación urgente es la eliminación de las termitas activas, que obligará a invertir 20 millones, costeados a partes iguales entre el consistorio y los vecinos. Los técnicos de Urbanismo admitieron que el tratamiento de exterminio obligará a desalojar momentáneamente a cinco comunidades de vecinos, con alrededor de 35 familias. En el resto de los casos, los residentes podrán continuar en sus pisos mientras se prolongue el tratamiento. En estas viviendas de Irala, el Ayuntamiento aplicará un tratamiento novedoso contra las termitas. Hasta ahora, se colocaban sustancias tóxicas incrustadas en la madera pero no lograban acabar con todos los insectos y creaban problemas para la salud humana. El nuevo método, que se aplica en Estados Unidos, consiste en unos cebos que actúan directamente contra el fisiología dede la termita y que le ocasionan la muerte al impedir su muda.

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