"Esto es "La jungla", deje su mensaje"
Alro European Investment tiene su sede social en Alcobendas, en los locales de una discoteca. Por eso, cuando a media tarde de ayer este periódico intentó hablar telefónicamente con los responsables de esta entidad saltó un contestador automático que respondió: "Estás hablando con La Jungla. En este momento no podemos entenderte. Deja tu mensaje".
A última hora de la tarde, un trabajador de La Jungla atendió la llamada de este periódico. Explicó que el teléfono marcado no correspondía a ninguna empresa denominada Alro European Investment, sino a la discoteca citada. Afirmó que Imran Qureshi era el "jefe" del local, y que desconocía si poseía algún tipo de negocio en Marbella o en otra parte.
Fuentes del Gobierno regional confirmaron ayer que la empresa Alro European Investment no aparece en los registros mercantiles. De hecho, un representante de esta empresa aseguró ayer a Efe que "se constituirá la empresa si sale adelante el proyecto". El alcalde de Rascafría restó ayer importancia a estos hechos. "Eso no es lo decisivo, sino a quiénes representan. Ya se sabrá, y hay gente muy importante detrás de ella". Entre sus propietarios podría estar el rey de Arabia Saudí, según manifestó a Europa Press el propio Imran Qureshi.
Por eso, Velasco anuncia que ante el mal recibimiento ofrecido por el consejero de Medio Ambiente enviará el proyecto al presidente del Gobierno, Alberto Ruiz-Gallardón, y a todos sus consejeros. También avanzó que la Fiscalía de Medio Ambiente tendrá en breve una copia, "para que vea que no existe daño medioambiental alguno".
No obstante, Velasco se negó a reconocer que este proyecto tenga unos extraños tintes. "Si todo esto fuese una falsedad, ¿qué motivo tendría [Qureshi] para presentarse ante el consejero?", se preguntó.
Por su parte, el portavoz de Medio Ambiente del PSOE, Armando García, afirmó ayer que su grupo apoya la paralización del proyecto del supuesto jeque árabe. García cree que la operación tiene el "mismo estilo que las realizadas por Jesús Gil en Marbella".
Los socialistas consideran esta iniciativa "poco seria" y les recuerda el escándalo del Petromocho, que provocó la dimisión del presidente asturiano por anunciar una inversión de jeques árabes que nunca se produjo.
Por su parte, el grupo Ecologistas en Acción calificó al alcalde de Rascafría de "Bartolín del Guadarrama", en referencia al concejal jienense del PP que dijo haber sido secuestrado por la ETA el pasado mayo, pero no pudo demostrarlo.
El alcalde de Rascafría, no obstante, no se da por vencido y asegura que seguirá "trabajando en el proyecto".
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