Los monitores de un centro para disminuidos en Gavà denuncian que trabajan sin convenio

Los trabajadores del centro de disminuidos psíquicos La Bóvila de Gavà (Baix Llobregat) han iniciado una campaña de protesta para denunciar que llevan tres años trabajando sin convenio colectivo colectivo. Las protestas de los trabajadores del centro pretenden acabar con esta situación y obligar al Ayuntamiento de Gavà, del que depende, a firmar el convenio. El centro La Bóvila atiende a personas que viven en Gavà, pero otras poblaciones, como Viladecans, Castelldefels, Begues y Sant Climent también se benefician de sus servicios. Los monitores del centro reclaman "un trato de igualdad con el resto de funcionarios municipales" y han criticado la actitud "intransigente" del Ayuntamiento a la hora de encontrar una solución al problema, ya sea negociando un convenio nuevo o aplicándoles el del patronato municipal al que pertenecen. El Ayuntamiento señaló ayer que las relaciones laborales del centro se rigen desde el año 1988 por un convenio colectivo del sector en el ámbito de toda Cataluña y que el Consistorio ha propuesto a los trabajadores la inclusión de una serie de cláusulas adicionales, que recogen buena parte de sus demandas, a excepción de los incrementos salariales. El Ayuntamiento ofrece un incremento salarial del 2,1%, la misma cifra que ha aplicado al resto de sus trabajadores. No obstante, los monitores juzgan que la propuesta es insuficiente teniendo en cuenta que un educador social en el Patronato Municipal cobra 189.000 pesetas mensuales, mientras que en la Bóvila perciben 155.000 pesetas.