_
_
_
_

Vicente Verdú gana el Espasa con un ensayo sobre los cincuentones

El periodista cree que "Señoras y señores" era un libro inevitable: "Me cayó encima"

"Es un libro sincero, inevitable. Me cayó encima sin llamarlo", dice Vicente Verdú sobre su ensayo Señoras y señores. Impresiones desde los 50, que ayer recibió el XV Premio Espasa de Ensayo, dotado con cinco millones de pesetas. La obra es una reflexión personal sobre las contradicciones de esa edad aparentemente redonda. "Por un lado eres un veterano: llega el sosiego, te aceptas a ti mismo, tu sensibilidad se multiplica... Por el otro, el espejo enseña un señor mayor, y despistado: fuera para siempre de la juventud, la publicidad, las veinteañeras...".

Verdú ha recurrido a la ironía como vía principal para explicarse y explicar cómo funciona esa nueva mirada que los 50 años parecen obligar a tomar. "Cualquier cambio de década es siempre una nueva etapa, pero el paso de los 40 a los 50 es seguramente el cambio más trascendente. Ya eres un señor sin remisión posible: antes podías ser un hombre de cuarenta y tantos, ahora eres un señor de cincuenta y... A los hombres les empieza a sentar bien el chaqué, a las mujeres sólo las ven como madrinas de boda..."Nacido en Elche en 1942, Verdú se encontró con el proyecto del libro encima de su mesa en 1993, recién ingresado en el club de los cincuentones. "Hice la primera versión y no me gustó, la fui cambiando y la terminé esta última primavera, ya con 55. Creo que eso ha sido una ventaja, porque ahora sé mucho más de los 50 de lo que sabía entonces".

Sin otro método que esa "nueva tranquilidad minuciosa" que, según cuenta, es la parte mejor de esa "edad meseta", Verdú viaja desde lo interior hacia lo universal (como si escribiera una autobiografía sentimental del presente colectivo), para contar cómo va cambiando la actitud hacia uno mismo, el trabajo, las mujeres o la propia imagen.

Constatación

Es un proceso que parece tener sus propias leyes, tiempos y divisiones; combina asuntos leves, cercanos a la frivolidad práctica, a la rutina, y temas gruesos, como la muerte, la paternidad o el amor. "Todo empieza en la consternación de la noche del 50 cumpleaños, luego llega el despiste de no saber cómo vestirte, de observar que ya no tienes modelos que tomar de la publicidad. Y de ahí viene la tremenda constatación: la pérdida de tu capacidad de seducción. Eres un tipo formal, serio, contenido, y se supone que no puedes hacer ciertas cosas, que hay cosas que tienes prohibidas, la primera tomar la iniciativa en el galanteo con las veinteañeras".Pero esa cierta pérdida de libertad (o de empuje), sostiene Verdú, tiene su contraste, su parte buena, su lado agradable. "Si uno sabe tomarse la cercanía de la muerte como algo impersonal, general, como un "no van a por mí sino a por todos", entonces es posible empezar a disfrutar de tu nueva condición".

Es un nuevo talante, más introspectivo y calmado, marcado (Verdú trata de pontificar lo menos posible, aunque cree que el ensayo sincero y personal interesa más que las abstracciones) por una mezcla de deseos nuevos, resignaciones definitivas y recuperaciones de viejos instintos: "Se produce, al menos en mi caso", dice el autor de El planeta americano (premio Anagrama en 1996), "un nuevo deseo de perfección, un intento de ser lo que uno es de una forma más depurada y más digna. Y eso va unido a una firme voluntad de enterrar los reproches y las culpas, a la tranquilidad de aceptarse finalmente a uno mismo y a la autoridad que da sentirse un veterano con medio siglo de experiencia".

En cuanto a lo sensorial, Verdú detecta una manera más intensa y placentera de agarrarse a las cosas que se tienen, a esas viejas y pequeñas cosas, "los olores, los sabores, todo eso que se reduce muy bien en la ensalada de tomate de Manuel Vicent, el aceite de oliva chorreando, el mar, el aprecio verdadero por los hijos..."

El jurado del XV Premio Espasa de Ensayo lo formaban Pedro Laín Entralgo (presidente), Jon Juaristi (anterior ganador), Fernando Savater, Amando de Miguel y Juan González (director editorial).

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_