"Los cubanos negros estamos de moda, pero ya se pasará"

Jorge Galvez nació en La Habana hace 33 años; hace cuatro llegó a Bilbao invitado por un amigo y se ha quedado. Es el primer abogado extranjero colegiado en Vizcaya y el único letrado negro. Profesor de danza y campeón de Europa de salsa, actualmente es uno de los rostros protagonistas de la serie estelar de ETB Entre dos fuegos. Es su primer papel; le descubrieron en el metro, como en las películas y ya se ha enganchado. Pregunta. El tópico dice que las mujeres cubanas llegan a España del brazo de un hombre enamorado. Usted ¿cómo llegó? Respuesta. Vine porque me invitaron unas amistades que conocí en La Habana. Casualmente, yo había traído mis títulos académicos para ver si podía hacer algo en materia de derecho porque para nosotros el derecho español es la madre del derecho. Tuve la grandísima suerte de empezar en la Escuela de Práctica de Derecho, y cambió todo. P.- No hay muchos cubanos que puedan viajar con esa facilidad que usted tuvo. R. La verdad es que no, pero hace cuatro años los visados no estaban tan restringidos. Yo tuve la suerte de que me concedieran uno. P. Desde que sale en la tele la gente cree que usted es el actor cubano de Maité. Pero, Entre dos fuegos es su primera interpretación. R. Ha sido obra de la causalidad. Yo estaba en el metro y me vió uno de los guionistas de Goenkale y parece que por mi físico daba el papel para el personaje. Me presenté al casting y me eligieron. P. ¿Le gustaría volver a Cuba para trabajar con otro Jorge cubano, Perugorria? R. Perugorria y yo fuimos compañeros en el instituto Boyeros, de La Habana, desde los 15 años hasta los 18. Nunca fuimos grandes amigos pero como todos los cubanos nos decíamos "hola ¿qué tal?", y si nos vemos seguro que me reconocerá. Llevamos el mismo nombre, así que cualquier cosa puede pasar. P. Su personaje tiene mucho de sex symbol. ¿Están los cubanos y, con perdón, los negros, de moda? R. Habrá que preguntárselo a las mujeres. Pero yo creo que la novedad atrae. Aquí, la población negra es escasa y el negro latino llama un poco más la atención que el negro africano. En parte sí creo que es un boom, como otros. P. ¿Se ha sentido alguna vez víctima del racismo? R. Yo no lo he sentido aunque no voy a negar que existe. El racismo depende en gran medida del nivel cultural de la persona negra, de su forma de relacionarse, de su dignidad. En Cuba, no hay racismo y como no lo he vivido, nunca pienso en ello. P. Los cubanos son muy nostálgicos. ¿Qué echa más de menos, las charlas en el malecón, la luz, el calor, la gente...? R. Todo, todo. Tienes que abstraerte mucho para meterte en el día a día de aquí. Yo estoy bien ahora pero lo he pasado francamente mal.