Cerdanyola se queda sin plátanos

Los vecinos de Cerdanyola volvieron a protestar por segundo día consecutivo para evitar que el Ayuntamiento talase los cerca de 90 plátanos centenarios de la avenida de Catalunya. Pero esta vez no pudieron parar las máquinas y salvar lo que ellos defendían como "un patrimonio de la ciudad". Ocho furgones del Cuerpo Nacional de Policía acudieron al lugar para desalojar a las cerca de 50 personas que se habían sentado alrededor de los plátanos con la intención de protegerlos de la tala. A los policías se sumaron los bomberos, quienes intervinieron cuando dos jóvenes se subieron a los árboles en señal de protesta. Los manifestantes también intentaron convencer por la vía del diálogo al alcalde accidental, Rafael Vinyals, e incluso pidieron al profesor de Biología de la Universidad Autónoma de Barcelona Josep María Germal que diese su opinión sobre la salud de los árboles. Germal aseguró que la tala no era necesaria. Pero Vinyals replicó con un informe según el cual el 84% no puede ser replantado. Al anochecer ya se había talado casi la totalidad de los 90 árboles del paseo, a excepción de unos cinco que se van a respetar. El concejal de Urbanismo también prometió plantar nuevos plátanos. Una concesión que no ha convencido a quienes reivindicaban la salvación de unos árboles de más de 100 años. Andreu Morera, de la Asociación Cerdanyola Viva, dijo: "La gente está indignada porque lo que se ha hecho es una barbaridad. Hemos convocado otra manifestación para el 1 de septiembre en protesta por la actitud del Ayuntamiento".