Bruselas investiga la adquisición de Rolls-Royce por Volkswagen

La Comisión Europea anunció ayer que está investigando la compra de Rolls-Royce por parte del fabricante alemán Volkswagen para analizar si plantea obstáculos a la libre competencia dentro de la UE. El Ejecutivo comunitario explicó que va a analizar la operación, valorada en 430 millones de libras (unos 106.000 millones de pesetas), por si pudiera tener consecuencias negativas sobre la libre competencia.El anuncio de la compra al grupo británico Vickers de Rolls-Royce, Bentley Motor Car Group y Cosworth fue hecho en mayo, aunque los detalles sobre las implicaciones que tendrá sobre el futuro del prestigioso fabricante británico de automóviles se han conocido hace tan sólo unos días. El grupo multinacional alemán comunicó el pasado 28 de julio su renuncia a los derechos sobre la marca Rolls-Royce, cuyos automóviles podrá fabricar sólo hasta el 31 de diciembre del 2002, fecha a partir de la cual será su competidor BMW el que usará ese nombre. La marca Rolls-Royce estaba en manos de una filial de la compañía británica, Rolls-Royce Aerospace, que había manifestado su interés en que fuera BMW quien se hiciera con el control del grupo en lugar de Volkswagen.

Según el acuerdo comunicado a finales del mes pasado, la firma bávara será la que seguirá fabricando automóviles con la marca Rolls-Royce desde el 2003, con una nueva compañía denominada Rolls-Royce Motors Cars Limited. La operación de adquisición de la marca Rolls-Royce le ha costado a BMW unos 40 millones de libras (unos 9.750 millones de pesetas). Por su parte, Volkswagen se queda con la antigua fábrica de Rolls-Royce en Crewe (Reino Unido).