En el futuro, el 80% de las operaciones se realizará con cirugía ambulatoria

Una nueva forma de operar se está imponiendo en este final del siglo XX. En el Hospital Virgen del Rocío, desde hace año y medio, la Cirugía Mayor Ambulatoria ha resuelto más de 39.000 intervenciones quirúrgicas sin que la estancia del paciente fuese superior a 48 horas. Ahora este servicio se ha centralizado en el Hospital Duques del Infantado (antiguo Pabellón Vasco) y todas las semanas se realizan en él 210 operaciones. De esta forma, sus responsables esperan que las listas de espera se reduzcan de 90 a 60 días.

La calidad de la asistencia sanitaria no depende de que el paciente esté o no ingresado en el hospital, sino del trato que reciba de los profesionales y de la eficacia del servicio. Por eso, en un futuro próximo, el 80% de las intervenciones quirúrgicas se realizarán con cirugía ambulatoria; es decir, la mayoría de los pacientes operados podrán marcharse a su casa al día siguiente o, como máximo, en un plazo de 48 horas. Desde allí, siempre asistidos por un equipo de profesionales, podrán seguir tranquilamente su recuperación. El objetivo de esta nueva forma de hacer medicina es mejorar la calidad de vida y asistencial del enfermo, al convertir su casa en una especie de anexo del centro hospitalario. "Esto va a suponer un cambio radical en el concepto de hospital. Hasta ahora, la importancia de los centros sanitarios se medía por la cantidad de camas que tenían; hoy, su relevancia se mide por la capacidad que tengan para realizar intervenciones quirúrgicas y para abordar las situaciones médicas que se le planteen", explica Joseba Barroeta Urquiaja, director Gerente del Hospital Virgen del Rocío. Las ventajas del sistema de la Cirugía Mayor Ambulatoria (CMA) son muchas y evidentes, señalan sus responsables. El papeleo y la burocracia se reducen, el tiempo de estancia hospitalaria del enfermo es mínimo, y a los recursos disponibles se le saca una mayor rentabilidad. También los profesionales se sienten más motivados con esta forma de hacer cirugía pues, aseguran, "su trabajo se ve". Asimismo se evitan interferencias de áreas distintas, y el contacto con los pacientes y familiares es más directo. No al nuevo hospital Al reducirse la estancia hospitalaria, la ocupación de camas es menor. Berroeta Urquiza considera que el Hospital Virgen del Rocío tendrá a corto plazo capacidad suficiente para dar respuesta asistencial a los más de 700.000 sevillanos adscritos a su área de influencia. En su opinión, de acuerdo con las nuevas tendencias quirúrgicas, no sería necesario construir un nuevo hospital en la zona del Aljarafe como se viene reclamando desde diversos colectivos políticos y sociales. "La experiencia de otros países como Estados Unidos nos muestra que la tendencia actual es la de reducir camas en lugar de aumentarlas. Y esto ocurre así porque cada vez son más los enfermos que se atienden en casa". Prácticamente, todas las patologías son susceptibles de ser abordadas por esta nueva forma de hacer cirugía. Las mas frecuentes son la denominada cirugía general, digestiva y vascular, la traumatología y ortopedia, la pediátrica y oftalmológica, la ginecológica, la urología o la plástica. Desde enero del año pasado hasta el presente mes de julio se han realizado más de 4.000 intervenciones de CMA en el hospital Duques del Infantado. Por especialidades destacan las 1.326 operaciones de cirugía general, las 1.300 oftalmológicas y las 1.135 relacionadas con la laringe. Además, se han realizado otras 3.000 intervenciones de cirugía menor. Un par de detalles a destacar en este nuevo servicio: la rapidez con la que los pacientes son preparado para la intervención y el decorado de las habitaciones que, sorprendentemente, están pintadas con colores vivos y variados rompiendo la tradición del blanco hospitalario.