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La tecnología de los hospitales se prepara frente al 'efecto 2000'

Este mes debe estar evaluado el impacto

Los ascensores hospitalarios o los aparatos de radioterapia pueden volverse locos al inicio del año 2000 si no se corrige la actual programación de los sistemas informáticos para que reconozcan los nuevos dígitos. El Insalud se ha marcado de plazo hasta el 31 de marzo para aplicar un plan de reconversión, cuyo impacto económico tendrá que estar evaluado antes de que termine este mes.

El Insalud, organismo que gestiona la sanidad pública en 10 comunidades autónomas, se ha dado de plazo hasta el último día de este mes para evaluar el impacto del llamado efecto 2000 en sus servicios. El hecho de que la mayoría de los ordenadores o microprocesadores dispongan de sólo dos dígitos para marcar los años puede desbaratar en la entrada del próximo siglo desde el funcionamiento de un ascensor hospitalario hasta el de un complejo aparato de radioterapiaLos responsables del Insalud están más preocupados por estos últimos que por los ordenadores "que siempre se pueden reprogramar", indica Carmen Navarro, directora de Presupuestos de esta institución. El problema mayor se encuentra en los sistemas empotrados, es decir, pequeños sistemas informáticos con programación temporal integrados en los aparatos de alta tecnología, tanto para terapia como para diagnóstico. Podría suceder, como explica Carmen Navarro, que uno de estos microprocesadores no reconociera el 00 como dígitos del año 2000 sino como los de 1900 e interpretar que la última revisión del aparato se hizo hace un siglo. La consecuencia es que, debido a los programas estrictos de control que tienen estos aparatos, dejarían de funcionar instantáneamente. Lo mismo puede pasar con un ascensor. Algunas de estas tecnologías podrán reprogramarse, pero otras no, advierte Navarro, quien no obstante matiza que la segunda posibilidad afectará a "las más obsoletas". Una vez calibrado el impacto, el Insalud hará una evaluación económica de las soluciones. En dos fases consecutivas, hasta el 30 de junio de 1999, se espera aplicar el plan de acción y las reconversiones necesarias.

Por otra parte, ayer concluyó el plazo para la presentación de ofertas a los concursos convocados por el Ministerio de Adinistraciones Públicas (MAP) para montar un Centro de Atención a los Usuarios para ayudarles a resolver el denominado problema Efecto 2000. El coste de este centro se eleva a 20 millones de pesetas.

Dentro del calendario fijado por el MAP para adaptar los sistemas informáticos de los organismos públicos, a finales de este mes debe estar listo el análisis del impacto del Efecto 2000 en la Administración General del Estado.

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