El arzobispado de Toledo alquila el vídeo macabro que se mostró a los escolares
Un grupo de padres teme que las imágenes antiaborto se difundan en otros centros
El secretariado catequístico del arzobispado de Toledo presta o alquila macabros vídeos antiabortistas a profesores, padres y parroquias que lo soliciten, a cambio de "la voluntad". Entre el material de apoyo a la clase de religión, este secretariado ofrece El grito silencioso, Mi mamá me ha matado y ¡Dejadme vivir!, vídeos de efectos visuales exagerados que mostró el cura Ángel Gómez Negrete a sus alumnos de 14 años en el colegio público Diecisiete de Octubre de Mocejón (Toledo) hace un mes. Los padres temen una campaña y solicitan una inspección de Educación.
Tras proyectar el vídeo, el cura se negó a facilitárselo a un grupo de padres alarmados por el relato de su hijos sobre las escenas sangrientas que habían contemplado (véase EL PAÍS del 30 de junio). Por ello, hicieron algunas indagaciones y acudieron al arzobispado, donde comprobaron que el secretariado catequístico tenía el vídeo El grito silencioso a disposición del público. Y lo alquilaron por 100 pesetas.En efecto, en la citada oficina se respondía ayer a quien preguntara al respecto: "Este vídeo se ha utilizado mucho en institutos de secundaria toledanos, es muy científico y está muy bien hecho".
Los padres alquilaron, además, una cinta que contiene otros dos títulos, Mi mamá me ha matado y ¡Dejadme vivir!, cuyas últimas secuencias, centradas en un aborto grabado en vivo con imágenes sangrientas y un feto despedazado, mostró también el cura a los alumnos como añadido a El grito silencioso. Sin embargo, las escenas de esos dos nuevos vídeos fueron omitidas en la entrega que le hizo el cura al director del colegio para que se lo mostrase al consejo escolar.
Un portavoz de la secretaría particular del arzobispado se limitó ayer a declarar a una periodista de EL PAÍS: "Se trata de un vídeo que existe en el mercado, de venta al público en cualquier librería. Aunque, lógicamente", añade, "en todas no van a tenerlo".
"Vídeos más fuertes"
El profesor de religión reconoció en sus primeras declaraciones del 29 de junio que El grito silencioso y otros vídeos "más fuertes" han sido proyectados en otros centros, y afirmó que consiguió el material "en Toledo", sin especificar el lugar de adquisición. El director del Diecisiete de Octubre, Luis Magán, que no tuvo conocimiento previo de la proyección de El grito silencioso y que desaprueba su contenido, recuerda, así como un grupo de padres, haber oído que este tipo de películas han sido exhibidas en otros centros, pero matizan que también han recibido versiones que niegan estos hechos. "En cualquier caso", afirma el director Luis Magán, "se habla de institutos, pero no de colegios de primaria".En la sede madrileña de la asociación antiabortista Provida, están a la venta también diversos títulos de vídeos contra el aborto. Aquí, una secretaria consultada previno la pasada semana (antes de que EL PAÍS publicara la noticia sobre el macabro vídeo ofrecido a escolares): "¿Lo van a enseñar en un colegio? Hay que tener cuidado porque es muy fuerte". Un portavoz del Episcopado ha declarado no tener conocimiento de este tipo de publicaciones y remite, para el caso de Toledo, al arzobispado de esta localidad.
En el vídeo que hizo estallar el conflicto en Mocejón, El grito silencioso, película educativa, un médico estadounidense arrepentido de un pasado abortista muestra los pasos de un aborto por aspiración de un embrión de 12 semanas con una profusión de imágenes engañosas que confunden embrión con feto y hasta con niño. El médico, Bernard N. Nathanson, siempre habla de "niño" y no escatima detalles sobre cómo los "trozos del niño pasan a través del tubo de aspiración", lo que según los expertos es imposible "porque con una aspiración el embrión sale entero", como dice un médico de la clínica Isadora de Madrid. El vídeo, al final, muestra cubos llenos de fetos muertos, del tamaño de recién nacidos.
El pasado 10 de junio, el arzobispo de Barcelona, cardenal Ricard María Carles, escribió en una carta dominical, ante la posible ampliación de los supuestos legales para el aborto: "Con la ley del aborto, a pesar del terciopelo, de las moquetas y del ambiente noble del Congreso de los Diputados, aquel salón no es ajeno a los cubos de desperdicios de ciertos quirófanos, adonde van a parar los restos de los recién nacidos".
El director del colegio Diecisiete de Octubre ha pedido a la Dirección Provincial de Educación que abra una ínvestigación.
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