ITP aumentará su facturación hasta los 50.000 millones de pesetas de la mano de la aviación civil

ITP vuela alto. La compañía líder del sector de motores de aviación con sede en el parque tecnológico de Zamudio cuenta con un ambicioso plan estratégico 1998- 2003 en el que prevé duplicar su facturación hasta los 50.000 millones de pesetas e invertir 48.500 millones de pesetas. La estrategia que seguirá la firma para conseguir los objetivos fijados para los próximos seis ejercicios pasa por el impulso a las ventas en el sector de la aviación civil, el despegue de las exportaciones a Suramérica y la adquisición de nuevos negocios de mantenimiento de aeronaves.

A principios de año, Industria de Turbopropulsores (ITP) inició su expansión internacional comprando el 60% de la firma mexicana ITR del grupo sudamericano Cintra. La planta mexicana, que estaba inactiva, funcionará a pleno rendimiento en el año 2.000 y aportará ya en esa fecha 4.000 millones de pesetas a la facturación total del grupo. La compañía cuenta ya con una cartera de pedidos comprometida hasta el año 2003 de 178.000 millones de pesetas, según adelantó a EL PAIS Joaquín Coello, consejero delegado de ITP. El área de ingeniería y fabricación aportará un 94% de los pedidos, entre los que destacan los ingresos del consorcio Eurojet para la fabricación del avión europeo de combate. La fabricante de motores de aviación facturó el año pasado 21.352 millones de pesetas, de los que un 30% provienen de los contratos de defensa. La firma, que fabricará además los motores M 138 del nuevo avión de transporte militar FLA (Future Large Aircraft) en un consorcio europeo, persigue "la diversificación del negocio, para repartir al máximo los riesgos", asegura el consejero delegado de ITP. "No podemos vivir sólo del sector militar", añade. Fundición junto al Nervión En los próximos años, el sector aeronáutico mundial prevé el aumento de las ventas en el sector de aviación civil, en detrimento del militar. El cambio de tendencia reparte la tarta del negocio en un 66% para los aeronaves comerciales y en un 34% para los aviones de defensa. Con este análisis, el grupo prevé invertir este ejercicio para reforzar su posición en el negocio privado 8.000 millones de pesetas, de un montante global de 48.500 millones de pesetas en el horizonte del 2003. Entre sus proyectos se encuentra la instalación de una fundición, probablemente en la Margen Izquierda, para la que ha contactado con inversores extranjeros y en la que tomaría una participación accionarial. El desarrollo tecnológico de las turbinas de gas y de la tobera vectorial, por la que puja en el mercado mundial junto a General Electric, y el crecimiento de la fabricación a un ritmo del 30% son algunas ramas de ingeniería y producción que impulsará ITP en sus plantas de Zamudio y Ajalvir (Guadalajara). La firma aeronáutica, en la que trabajan actualmente 925 personas, incrementará su plantilla a un ritmo anual de 100 trabajadores. Próximamente cambiará también la composición accionarial de ITP, integrada por Rolls Royce (45%), Sener (25%), Bazán (25%), y la Corporación IBV (5%). La ingeniería vasca Sener ha mostrado interés por comprar las participaciones que Bazán, pendiente de privatización, e IBV quieren vender.