Marqués busca un vicepresidente y reta al PP a que presente una moción de censura en Asturias

La dimisión del vicepresidente asturiano, Ramón García Cañal, y las del consejero de Agricultura, Luis Peláez, y el director regional de Cooperación, Noel Zapico, elevaron anoche a seis los ceses de altos cargos desde que comenzara la crisis que enfrenta al presidente del Principado, Sergio Marqués, y a la dirección del PP. Tras una reunión en la sede del Gobierno regional en la que se formalizaron las tres nuevas renuncias, el jefe del Ejecutivo asturiano anunció que nombrará de inmediato a sus sustitutos y retó al PP a que presente una moción de censura contra él si quiere derribarle.

Los tres últimos caídos en la batalla del PP de Asturias se suman al viceconsejero de Bienestar Social, Javier Suárez Amandi, al director regional de Deportes, Pedro Muñiz y a la responsable de la Secretaría de la Mujer, Inmaculada González, que abandonó su cargo en la mañana de ayer. Las renuncias de García Cañal, Zapico y Peláez se produjeron tras una reunión en la sede de la Presidencia del Gobierno convocada por el propio Marqués y que duró tres horas y media. A la cita asistieron, además del consejo de Gobierno en pleno, alcaldes y diputados regionales afines a Marqués. Éste se limitó a señalar, al término de la reunión, que acepta "con el mismo encanto" las dimisiones que los nombramientos y, tras dejar claro que tiene intención de resistir al frente del Gobierno ya que no tiene "más que una palabra", anunció que de inmediato hará públicos los nombres de los sustitutos de los dimisionarios. Sólo uno de ellos, el ya ex consejero Peláez habló anoche para decir que no tenía "sentido" seguir manteniendo una posición "que para nada sirve a los intereses de Asturias". Pese a la firmeza de Marqués,el PP confía en que la dimisión de García Cañal le disuada de seguir adelante sin el respaldo del grupo parlamentario. Ayer volvieron a circular rumores sobre una hipotética renuncia inminente del presidente de la comunidad asturiana. Un alto dirigente regional del PP aconsejó a este diario aguardar hasta la tarde por si se producían sorpresas, pero un portavoz de la presidencia autonómica aseguró a las 15.30 horas que Marqués no tenía intención de dejar el cargo y que mantendría inalterable su programa.

Marqués conocía desde primera hora de la mañana la firme decisión de su vicepresidente y de Noel Zapico de abandonar sus cargos. La renuncia de ambos, cualificados militantes del PP, es una pieza clave en la guerra de posiciones que mantiene la dirección del partido en su estrategia de cercar al equipo de Marqués. Pero Marqués parece dispuesto a resistir. Mientras sigue esperando a que el presidente nacional del PP, José María Aznar, le reciba, volvió a retar públicamente al presidente regional, el senador Isidro Fernández Rozada, a que promueva una moción de censura si desea relevarlo, después de que el pasado sábado anunció que el Grupo Parlamentario le retiraría la confianza política. "Si quiere presentar contra su propio Gobierno una moción de censura, hágalo, y haga el ridículo de una vez por todas", replicó Marqués. "La retirada de la confianza política al presidente", añadió, "se ejercita a través de la moción de censura. Déjese de palabras más o menos huecas y vanas, y haga lo que la ley dice", añadió. El PP carece de la mayoría absoluta en la Cámara para garantizar el éxito de una moción de censura. Fernández Rozada ha acusado a Marqués, en declaraciones al diario La Nueva España, de pedir diálogo al partido tras "tres años de monólogo autoritario". Según él, Marqués ha despreciado al PP y a su grupo parlamentario, ha tratado de empañar los logros del Gobierno central y ha desarrollado una gestión conflictiva.