El Gobierno de Navarra acusa al PSN de utilizar una "retórica infantil"

El Gobierno de Navarra negó ayer tajantemente las acusaciones lanzadas por los socialistas de que incumple el espíritu de la LOGSE y, además, acusó al PSN-PSOE de utilizar una "retórica infantil" para justificar su decisión de romper, en mayo, los pactos presupuestarios por sus discrepancias con la política educativa del Ejecutivo conservador. Mientras Unión del Pueblo Navarro (UPN) defendía los logros educativos alcanzados en Navarra y atribuía a "intereses estratégicos internos" el rechazo socialista a las políticas educativas del Ejecutivo autónomo, la Mesa y Junta de portavoces del Parlamento de Navarra admitía a trámite la moción reprobatoria del PSN, presentada la víspera. Todos los grupos, excepto el del Ejecutivo regionalista, votaron a favor de la admisión. El Gabinete que preside Miguel Sanz acusó el golpe de efecto socialista de presentar en el Parlamento una moción reprobatoria contra la política educativa del Gobierno y, lejos de evidenciar un espíritu de enfrentamiento preelectoral con los socialistas navarros, difundió una extensa y pormenorizada comunicación pública que concluía con un nuevo ofrecimiento de "entendimiento y consenso" para buscar una política educativa "progresista" basada en el "irrenunciable principio de libertad de enseñanza". El enigma de Alli El ex presidente Alli, líder de Convergencia de Demócratas de Navarra (CDN), aseguró a los medios de comunicación que su partido no está de acuerdo "con la mayor parte de la política educativa del Gobierno foral" y que, a pesar de defender el sistema de conciertos para los bachilleres de la LOGSE, su partido "no tiene ninguna razón para favorecer al consejero de Educación ni al Gobierno de UPN". Alli presentó una enmienda a la totalidad del proyecto que regula la financiación de los bachilleratos posobligatorios. UPN quiere concertar el primer curso con la enseñanza privada, medida que se pondrá en marcha el próximo otoño. El CDN va más lejos y propugna que la ley garantice los conciertos también para el segundo curso. No obstante y al margen de esa coincidencia con UPN, el partido de Alli, convertido de hecho en el árbitro de la moción reprobatoria contra el Ejecutivo, no quiso decantarse en ningún sentido. "Es evidente que no participamos de la línea de acción de UPN en política educativa", declaró Alli, quien desgranó divergencias en enseñanza infantil, el modelo D (en euskera) y otros asuntos. El líder de CDN fue más allá al asegurar: "Podemos estar de acuerdo con el contenido de la propuesta del PSN porque la política educativa de UPN no tiene ningún consenso, es contraria al interés general, es partidista, y no es ni la más justa ni la más equitativa". No obstante, Alli eludió pronunciarse sobre su voto final y dijo que dependerá de la actitud de UPN ante su enmienda a la totalidad.