Sufrimiento y remedio

La cabeza, la espalda y las piernas son las zonas que más guerra dan a los españoles, según una encuesta realizada este mismo año por la Sociedad Española del Dolor (SED).Un 38%, de entre 5.000 encuestados, prefirió aguantar los dolores estoicamente y un 62% optó por tomar algún medicamento; de éstos, tres de cada 10 decidieron medicarse por su cuenta y riesgo. Dentro de la oferta farmacéutica, la aspirina fue el remedio más solicitado.

La encuesta de la SED -sociedad médica creada en 1990, que agrupa a 800 especialistas- se realizó entre aquéllos que en algún momento padecieron un dolor agudo o crónico. Éste fue definido por los médicos, en 1965, como un síndrome que se aplica a los pacientes que durante años padecen un dolor sin una lesión orgánica aparente que lo produzca.

Las investigaciones sugieren que el dolor crónico es un estado de conducta -iniciado por una lesión real- en el que el sufrimiento dura lo suficiente como para convertirse por él mismo en una enfermedad. Las personas creyentes sufren el dolor en la misma proporción que los agnósticos, según la encuesta. Las mujeres padecen más dolor que los hombres, un 37% frente a un 26%, según el presidente de la SED, Enrique Reig, jefe de la unidad del dolor del hospital Puerta de Hierro, de Madrid.

La mitad de los dolientes declaró que sus relaciones personales se vieron alteradas por ese malestar, sobre todo, en lo concerniente al rendimiento laboral.