El alcalde rectifica y exime de pagar tributos a 1.300 tenderos del Rastro
El gobierno de José María Álvarez del Manzano rectificó ayer y eximirá a los vendedores del Rastro que no son tenderos profesionales del pago del impuesto de actividades económicas (IAE) y de la obligación de darse de alta en la Seguridad Social. Cerca de 1.300 de los 1.700 tenderos del Rastro no son profesionales y no viven del negocio dominguero de la venta ambulante; tan sólo montan su tenderete para sacarse un dinero extra que añadir a la pensión o a su trabajo. La semana pasada les llegó una carta municipal en la que se les exigía el pago del IAE y el certificado de alta en la Seguridad Social como autónomos para continuar en el Rastro. Alrededor de 300 comerciantes se concentraron ayer a la entrada de la Junta Municipal de Centro para exigir que se retirara la norma. El Ayuntamiento accedió.
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Nueva circular
Los comerciantes recibirán el domingo una circular que anula el recargo fiscal anunciado
El próximo domingo, la junta de Centro distribuirá una nueva circular en la que se aclara el asunto: los vendedores no profesionales, para seguir en el mercado, deberán entregar una fotocopia del DNI, una declaración jurada de que el tendero no vive exclusivamente de la venta ambulante, y un compromiso por escrito de que la persona que vaya a explotar el puesto es el titular de la autorización. Todos los vendedores de El Rastro pagan una licencia por ocupar el suelo municipal, que cuesta unas 20.000 pesetas al año, según explicaron ayer algunos tenderos. La edil de Centro, María Antonia Suárez, declaró que todo fue "un malentendido". "Nunca quisimos echar a los más humildes de El Rastro, que seguirán", añadió.
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