Refuerzos policiales en los municipios del Segrià durante la recogida de fruta

La Guardia Civil de Lleida comenzó a patrullar ayer por los municipios leridanos de Torres de Segre, Alcarràs, Aitona, Seròs, Soses, Massalcoreig y La Granja d"Escarp para evitar incidentes callejeros entre los temporeros que empiezan a acudir a la zona para trabajar en la recolección de la fruta. Estas siete localidades del Baix Segre concentran una parte importante de la producción frutícola de la provincia y por ese motivo requieren un mayor cantidad de mano de obra. Las autoridades esperan este año la llegada de unos 8.000 trabajadores, la tercera parte de los cuales serán extranjeros. Las previsiones realizadas por la Administración y los empresarios del sector indican que, de no existir contratiempos, la producción de pera, manzana y melocotón será esta campaña superior a la que se registró en la anterior, que fue de 941.392 toneladas. Sin embargo, el hecho de que la producción sea mayor no significa que se empleen más personas en la recolección pues en los últimos años la campaña dura más tiempo y el sector está mejor organizado. El año pasado fue contratado el 87% de las 7.864 personas inscritas en las 54 oficinas gestionadas por el Departamento de Trabajo. Estos trabajadores estuvieron empleados en la recogida de la fruta una media de dos meses y medio. El número de trabajadores procedentes de migraciones interiores (Andalucía, Extremadura y Zamora) y contratados a través de los sindicatos Unió de Pagesos, UGT y Comisiones Obreras fue de 666, el 9.68% frente al 6,1% del año anterior. Las autoridades han constatado que cada vez son menos los inmigrantes en situación irregular que buscan trabajo. El año pasado, más del 50% procedía de Marruecos, el 12% de Argelia, el 5,1% de Portugal y el 4,4% de Gambia y de Senegal. Tanto las inscripciones como las contrataciones alcanzan la cresta durante la primera quincena de agosto, coincidiendo con la recolección de la pera blanquilla. Este periodo suele ser el de mayor conflictividad. Alcaldes, representantes de los sindicatos, de las administraciones y de las fuerzas de seguridad se reunieron ayer en Lleida para planificar las medidas policiales que se debe adoptar. La Guardia Civil destinará a 19 agentes -25 los fines de semana- y a partir del 1 de julio se desplegarán en la zona 30 miembros de los Mossos d"Esquadra, que tendrán una comisaría temporal en la localidad de Aitona.