Iberdrola condiciona los proyectos energéticos de la Margen Izquierda a la rebaja del precio del gas

"Estamos trabajando para hacer las inversiones. Queremos hacerlas, pero necesitamos que sean competitivas". Iñigo Oriol, presidente de Iberdrola, se ha mostrado así de contundente al hablar de las inversiones energéticas proyectadas en la Margen Izquierda -la planta IGCC para aprovechar los residuos del petróleo de la refinería de Petronor en Muskiz y la central eléctrica de gas por ciclo combinado ligada a la planta regasificadora del puerto de Bilbao-. Oriol ligó su viabilidad a una rebaja sustancial del precio del gas de las dos pesetas por termia actuales a 1,60.

El precio del gas está pendiente de ser liberalizado. En nuestro país el coste de la termia, que en estos momentos supera ligeramente las dos pesetas, viene determinado por las tarifas del Ministerio de Industria y Energía. De acuerdo con el Ente Vasco de Energía (EVE) España es el segundo país europeo con la tarifa de gas más barata, sólo superada por Gran Bretaña, donde la termia cuesta alrededor de dos pesetas. En todo caso, el sector gasístico, al igual que el eléctrico, vive inmerso en un dificultoso proceso de liberalización de tarifas. Oriol recordó anteayer en una reunión con periodistas que Iberdrola tiene reconvertida la central térmica de Santurtzi en una central de ciclo combinado de 400 megawatios, que podría funcionar ya y que no lo hace por el elevado alto costo del gas. Las otras dos fases de la central, con la misma capacidad, están pendientes de los permisos administrativas y de que resulten rentables. Liberalización Iberdrola tiene ya constituida una sociedad con Amoco, Repsol y el EVE para poner en marcha en el puerto de Bilbao una planta regasificadora asociada a una central de ciclo combinado, con una inversión de 100.000 millones de pesetas. Desde el Gobierno vasco se espera que la entrada de gas gracias a Amoco, junto con la liberalización del sector, permita que los proyectos de generación eléctrica sean rentables. El departamento de Industria, dirigido por Javier Retegui, ha tenido estos dos proyectos como una de las claves esenciales de su política de reindustrialización de la Margen Izquierda. El otro gran proyecto energético, la planta de IGCC en Muskiz, en el que están invitados a participar la BBK y el EVE, y que contaría con una inversión de cerca de 150.000 millones de pesetas está impulsado por Proyectos Integrados Energéticos, sociedad participada al 50% por Ibedrola y Repsol. Oriol recalcó que Iberdrola y Repsol están muy interesados en el proyecto, al igual que Petronor y el Gobierno vasco, pero que en proyectos de semejante volumen de inversión "no es voluntarismo lo que necesitamos". El presidente de Iberdrola indicó que actualmente los precios del gas hacen que el coste de la termia se sitúe en dos pesetas y que "para ser competitivo debería reducirse a 1,60 pesetas". Oriol explicó que Iberdrola cuenta con emplazamientos para la construcción de centrales de ciclo combinado en Castellón, Navarra, Santurtzi y Cartagena, y que la compañía estaría encantada de iniciar las inversiones. Pero todo dependerá de si el gas que utilizarán como materia prima está o no a un precio competitivo. A su juicio la actual tarifa debería reducirse en el futuro en un 20%. Difícil alianza La inversión en Muskiz se inscribe en el acuerdo firmado por Iberdrola, Repsol y Gas Natural a principios de 1997. El presidente de Iberdrola señala que en el ámbito internacional esta alianza con Gas Natural ha funcionado muy bien, pero evitó pronunciarse sobre sus relaciones en el mercado español. Oriol reconoció que la liberalización de los mercados de hidrocarburos, donde se encuentra el gas natural, requiere de empresas fuertes para poder competir en un mercado mundializado, pero al mismo tiempo considera que deben tomarse las medidas necesarias para rebajar los precios del gas como se hizo en su día con la electricidad. Esta misma argumentación fue destacada por el vicepresidente y consejero delegado de Iberdrola, Javier Herrero, quien dijo que "no es lógico que el gas vaya por un lado, cuando el mayor mercado del gas en el futuro va a ser la electricidad". Por otro lado, Iberdrola mantiene la difícil e incómoda doble alianza con Telefónica, con quien comparte al 50% Utilitel Comunicaciones, a la búsqueda de nuevos servicios en el mundo de las telecomunicaciones, y con su competidora Euskaltel, donde posee el 10% del capital. MÁS INFORMACIÓN EN PÁGINA 59