El "cable de Tarifa" se inaugura hoy con un acto oficial y otro de protesta

El cable de Tarifa, nombre de guerra que se le dio a la interconexión eléctrica entre Marruecos y España, se inaugura oficialmente hoy, en el mismo clima de enfrentamiento que se mantuvo durante la instalación del tendido. Los actos protocolarios de inauguración se celebrarán paralelamente en Sevilla y Tánger pero, a la misma hora de esta puesta de largo oficial, la Plataforma Anticable de Tarifa, que agrupa a los colectivos contrarios al proyecto, tiene prevista una contrainauguración en la zona de La Vega, allí donde en 1996 tuvieron un duro encontronazo con la Guardia Civil. La interconexión se realiza con un haz de cuatro cables para transportar 400.000 voltios. El tendido va enterrado para atravesar las playas de Tarifa y luego, a 15 metros de profundidad bajo el mar, surge de la tierra para continuar hasta Marruecos posado en el lecho marino, a una profundidad máxima de 615 metros en mitad del estrecho de Gibraltar. Cada cable de los cuatro del haz tiene 14 centímetros de diámetro y su peso es de 56 kilos por metro. Los ecologistas creen que los campos electromagnéticos que crean los cables son perjudiciales para la fauna submarina. El tendido permitirá elevar la capacidad eléctrica de Marruecos, que ha tenido que ver cómo la obra sufría sucesivos retrasos desde que comenzara en 1994.