La Universidad de Girona acusa a la Internacional de romper el consenso

La posible llegada de una universidad privada ha disparado la alarma. El rector de la Universidad de Girona (UdG), Josep Maria Nadal, mantiene que el proyecto de crear dos facultades universitarias en Figueres, impulsado por Alt Empordà Segle XXI -una fundación privada recién constituida- y la Universidad Internacional de Cataluña (UIC), también privada, rompe el consenso existente entre los rectores de las universidades catalanas.

Nadal afirma que, ante la previsible disminución de alumnado que las universidades experimentarán durante los próximos años, la puesta en marcha de estos estudios resulta temeraria y peligrosa para las demás universidades. El rector de la UdG asegura que el anuncio de estos estudios constituye una imprudencia, puesto que todavía no han sido aprobados por el sistema universitario catalán. "Es incongruente que mientras la Generalitat nos plantea la coherencia del mapa universitario catalán, surjan iniciativas como la de la Universidad Internacional, avalada por personajes públicos muy ligados a Convergència i Unió (CiU), que pretenden situarse al margen de la racionalidad del sistema", asegura Nadal. El rector gerundense afirma que hasta el momento las universidades privadas catalanas pueden equipararse a las públicas en condiciones académicas, profesorado e investigación, pero añade que para continuar así deben evitar caer en la tentación de hacer pasar por universidades lo que no pueden ser más que simples academias. Nadal agrega que en un contexto como el de Figueres es muy difícil poner en pie la infraestructura material y humana necesaria para ofrecer estudios de calidad y auténtico nivel universitario. Fuentes de la UIC indicaron ayer que el proyecto de ofrecer estudios de Bellas Artes e INEF en Figueres está en fase embrionaria y que no avanzará si no existe consenso. A Joaquim Bech de Careda, abogado y miembro de la fundación Alt Empordà Segle XXI, la actitud de Nadal le parece un lamentable ataque de histeria centralista que pretende evitar que Figueres recupere su protagonismo. Bech de Careda asegura que se trata de sumar y no de entrar en batallas estériles y recuerda que fue la propia fundación la que fue a buscar a la Universidad Internacional y no a la inversa.