«Un pirómano en un polvorín»

«Un pirómano en un polvorín». Así definió ayer el embajador palestino en Londres, Afif Safeyeh, al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu. El diplomático hizo estas manifestaciones en el transcurso de una entrevista efectuada por un periodista del canal de televisión británico Sky News. «Yo creo que la opinión pública internacional, los líderes políticos y los interlocutores americanos perciben cada vez más al señor Netanyahu como una molestia, un problema para sus amigos», añadió el diplomático Safeyeh al analizar la posibilidad de un acuerdo entre israelíes y palestinos en la reunión que se iniciará mañana en Londres.La ausencia de tacto político del más importante representante del Gobierno palestino en Londres provocó ayer el estupor en medios diplomáticos de Jerusalén. Una sensación semejante a la que el sábado por la noche tuvieron esos mismos observadores, sorprendidos por las imágenes de la cadena de televisión norteamericana CNN, desde Bagdad, en las que seguidores y adversarios del presidente Yasir Arafat se enzarzaron en una pelea.

La trifulca, que tuvo como escenario una conferencia internacional convocada por el Gobierno iraquí para coordinar el apoyo de los países árabes a la causa palestina, se inició cuando opositores y defensores de Yasir Arafat en plena sala se golpearon y escupieron a la cara.

En Roma, Juan Pablo II, en su habitual alocución de los domingos en la plaza de San Pedro, lanzó ayer un mensaje en apoyo a las conversaciones de Londres en el que dijo que esta reunión «aspira a superar las serias dificultades que el proceso de paz entre el Estado de Israel y los palestinos está experimentando».

Su Santidad, que invitó a los fieles a que rezaran por el éxito del encuentro, añadió que el único camino posible en el conflicto es el que se basa en «el respeto, la justicia y la cooperación».