El comité ejecutivo de la Fira de Barcelona, dividido tras un agrio debate sobre su futuro
El debate sobre el futuro de la Fira de Barcelona vivió ayer un agrio episodio en el comité ejecutivo de la entidad que preside Josep Lluís Jové. Pedrosa, de nuevo en el ojo del huracán. La teniente de alcalde de Barcelona Pilar Rahola y los empresarios Jaume Tomás (Alimentaria) y Josep Blanchart (Construmat) sostuvieron que Pedrosa es inviable y apostaron por remozar el recinto de Montjuïc. Esta posición -contraria a la de Jové y la de otra representante municipal, Maravillas Rojo, también teniente de alcalde- contó con el respaldo silencioso de Jaume Angerri , de la Generalitat.
El proyecto de modernización del recinto histórico de Montjuïc legitima la inviabilidad anunciada de Pedrosa. Esta modernización tiene un precio -10.000 millones de pesetas- y un diseño urbanístico basado en el traspaso a la Fira de edificios como el de la Guardia Urbana y los bomberos, en la calle de Rius i Taulet, y el uso de pabellones ahora obsoletos, además de destinar a la feria el Palacio de los Deportes. El proyecto también tiene valedores privados: los empresarios, representados ayer con encono por Jaume Tomás (Agrolimen), el presidente de Alimentaria, y por el constructor Josep Blanchard, presidente de Construmat. Pedrosa, a Mercabarna Ayer, apenas entrados en harina los integrantes de la ejecutiva ferial, la defunción de Pedrosa registró el sorprendente plácet nacionalista, que propiciaba el giro espectacular. El grupo de CiU en el Ayuntamiento de Barcelona aseguró que La Fira debe ampliarse en el recinto de Montjuïc y propuso que el polígono Pedrosa se destine a otros usos, como la ampliación de las instalaciones de Mercabarna. El portavoz del grupo, Joan Puigdollers, explicó que CiU considera que la Fira de Barcelona debe ampliarse en la propia ciudad "porque el atractivo de la Fira de Barcelona es ofrecer una feria dentro de su núcleo urbano, a diferencia de otras ciudades", y porque Pedrosa, situado en L"Hospitalet, ha resultado "un fiasco". Puigdollers cree conveniente, en este sentido, que la Fira "ocupe" espacios próximos, como los cuarteles de la Guardia Urbana y los bomberos, y añadió el canódromo, el Palacio de los Deportes y la plaza de toros de las Arenas. Al encono de Rahola en la ejecutiva apoyada por CiU desde los pasadizos municipales, respondió Maravillas Rojo, la otra representantes municiapl, que defendió el plan estratégico actual de la Fira, basado en el uso de Pedrosa. Los restantes miembros de la ejecutiva presenciaron atónitos el florete dialéctico de las damas municipales. Los más sorprendente fue el silencio de Jaume Angerri, representante de la Generalitat, respecto de la ampliación. Sea como sea, su silencio no sirvió de lenitivo y acabó por reforzar la tesis en contra de Pedrosa lanzada por el portavoz municipal de CiU. El comité ejecutivo de la Fira de Barcelona no alcanzó ningún acuerdo y, tras la áspera disputa, sus miembros decidieron aplazar el debate hasta después de las elecciones a la Cámara de Comercio.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.