Las cajas de ahorro vasco-navarras aumentaron el año pasado sus beneficios un 22%. Las participaciones de las cajas en empresas superan los 95.000 millones

Las cajas de ahorros vasco-navarras consiguieron el año pasado unos beneficios antes de impuestos de 68.700 millones de pesetas, lo que representa un incremento de casi un 22% con respecto a 1996. Según el presidente de la federación que agrupa a las entidades, José Ignacio Berroeta, quien también preside la Bilbao Bizkaia Kutxa, esta situación de solvencia, por encima de la media, coloca a la federación en "una buena posición competitiva" para afrontar el reto del euro. La federación agrupa a la BBK, la Caja Vital de Álava, la Kutxa de Guipúzcoa y las navarras Municipal de Pamplona y la Caja de Ahorros de Navarra. Berroeta presentó ayer al lehendakari, José Antonio Ardanza, la memoria económica anual de la entidad. Las cajas de ahorro han superado los cuatro billones de pesetas de recursos administrados, lo que ha supuesto unos beneficios de 68.700 millones de pesetas el año pasado.Aunque el margen financiero de las cajas de ahorros se está estrechando con la bajada de los tipos de interés, que se situarán entre el 4 y el 3,75% a final de año, Berroeta hizo hincapié en que han conseguido reforzar su solvencia. Así, expuso que están en condiciones de afrontar el reto europeo. "En el aspecto técnico financiero nuestra foto es buena de cara a nuestro propio mercado y sin miedo al escenario del euro ni a la competencia con entidades financieras del resto de Europa", señaló. Sobre las perspectivas para 1998, auguró que confía en conseguir un aumento de los beneficios similar al de 1997, después de un primer trimestre de este año que ha transcurrido igual que el del año pasado. De los 68.700 millones de pesetas de beneficios, se destinarán 11.681 a la obra social. La materialización de la obra social se orienta a diversas áreas, siendo la más importante la del ámbito asistencial (4.868 millones de pesetas), la docente (3.254 millones de pesetas) y la cultural (2.941 millones). Por otra parte, la cartera de participaciones de las cajas se eleva hasta los 95.779 millones de pesetas, de los que 41.000 millones corresponden a valores industriales -Airtel, Euskaltel, Retevisión y Repsol- y 25.000 millones, a empresas de autopistas.