La sociedad civil presiona cada vez más al poder local, según el estudio anual de la Fundación Encuentro

La sociedad española cada vez va a reclamar un mayor protagonismo en los ámbitos locales, y ello conducirá a que la administración deba ponerse al día. Los ciudadanos, por la modernización de la sociedad y por la creciente integración en Europa, ejercerán una mayor presión sobre el poder local. Son conclusiones del Informe España 1997, una interpretación de su realidad social, del Centro de Estudios del Cambio Social (CECS) de la Fundación Encuentro, presentado ayer. "Ha llegado el momento de la democracia representativa", dice José María Martín Patino, presidente de la Fundación Encuentro. "La democracia representativa está en crisis en todo el mundo, porque ya no se pueden reformar los sectores sin contar con el pueblo. Es sintomático que se distinga entre lo político y lo social". En la presentación, presidida por el infante Carlos de Borbón, Patino resaltó lo que considera los tres rasgos fundamentales de la actual sociedad española: "El presente perturbado por el tiempo de los jueces, la necesidad de pasar de la democracia representativa a la democracia participativa y la gran revolución cultural que va a suponer la instalación del euro".

El informe aboga por que el mundo judicial sea "más abierto y transparante" y advierte que aún "no se ha llegado a culminar el proceso de despolitización de la justicia". Patino y la presidenta del Instituto Nacional de Estadística, María del Pilar Martín-Guzmán, coincidieron en que España no podía perder el tren del euro y compartieron su preocupación por el desempleo. Ambos además señalaron que se debe potenciar la formación para paliar el problema del paro.

Otro de los aspectos abordados es el papel de los ayuntamientos. El alcalde de Vitoria, José Angel Cuerda, insistió en un nuevo marco legal que regule aspectos como la financiación. El alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano, destacó el papel vertebrador de los ayuntamientos.

"El gobierno local va a cobrar más importancia", advierte Joan Subirats, catedrático de Ciencia Política y de la Administración de la Universidad Autónoma de Barcelona. El problema se le plantea a la administración, que no se ha adaptado a la evolución ni a las pautas que rigen en la UE."Los ciudadanos", dice Subirats, "no quieren saber de quién es competencia un problema, sino que se resuelva". El estudio plantea que el ámbito comarcal muestra ya un gran peso en la UE, y en España ocurrirá lo mismo, tras el retorno a la política social impulsado por 20 años de Ayuntamientos democráticos.

El informe -patrocinado por la Fundación Ramón Areces e Iberdrola- analiza además la la internacionalización de las empresas españolas; los 10 años de política agrícola en la UE; el camino hacia un consenso en la sanidad; la colonización de la televisión en las familias; y la evaluación de los centros educativos.