La fiscalía implica al ex jefe de la policía judicial con el narcotráfico mexicano
El ex director de la policía judicial federal de México (1993-95) Adrián Carrera quedó bajo detención domiciliaria después de que la Procuraduría General de la República (PGR) (Fiscalía) encontrara elementos suficientes para investigar sus relaciones con el narcotraficante Amado Carrillo Fuentes y con Raúl Salinas de Gortari, hermano del ex presidente Carlos Salinas.El general Jesús Gutiérrez Rebollo, preso con cargos de corrupción en la cárcel de máxima seguridad de Almoloya, acusó a Carrera el 22 de abril de 1997 de pertenecer al equipo de funcionarios que protegía el tráfico de cocaína del cartel de Juárez hacia Estados Unidos. Y según el agente de aduanas estadounidense Roberto Rutt, Amado Carrillo, dado por muerto, pagaba sobornos a Carrera Fuentes y también entrega maletas repletas de dólares al ex subprocurador Mario Ruiz Massieu, hermano del asesinado secretario general del oficial Partido Revolucionario Institucional (PRI) José Francisco Ruiz Massieu.
Todo enredado y confuso, pero apestando a delito, Carrera afronta también un proceso por su supuesta participación en las torturas sufridas por María Eugenia Ramírez, amante de Fernando Rodríguez, principal testigo de cargo contra Raúl Salinas, a quien se imputan graves hechos de corrupción. Carrera, que anteriormente logró quedar en libertad previo pago de fianza, presentó la renuncia en 1995, pero hasta entonces dirigió las investigaciones derivadas de los asesinato de Ruiz Massieu y Luis Donaldo Colosio, ex candidato presidencial por el PRI, todavía no resueltos.
El diario El Universal publicó ayer que Carrera Fuentes habría operado como intermediario entre narcotraficantes y funcionarios de la pasada Administración. La entrada en desgracia de Adrián Carrera comenzó en 1994 como supuesto responsable de interrogatorios extrajudiciales al asesino material de Luis Donaldo Colosio, Mario Aburto, a quien trasladó de la cárcel de Tijuana a Almoloya. Aquellas actuaciones causaron, como poco, extrañeza y desconcierto. El 20 de abril de 1995, ese rotativo afirmó que Mario Ruiz Massieu recibió dinero de todos los carteles de la droga mexicanos, no sólo del encabezado por Juan García Abrego, actualmente encarcelado en Dallas (Estados Unidos). El intermediario habría sido, según esa fuente, su compadre Adrián Carrera.
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