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Beamud anuncia mano dura en Melilla con los inmigrantes que alteren el orden

Enrique Beamud, el delegado del Gobierno en la ciudad autónoma de Melilla, declaró ayer que no se consentirán alteraciones del orden público por parte de los inmigrantes y advirtió que se tomarán las medidas necesarias contra los transgresores, incluida la expulsión. Las declaraciones de Beamud a un grupo de periodistas en la Delegación del Gobierno sé produjeron 24 horas después de que un grupo de argelinos -90 según las autoridades- se manifestaran el pasado domingo e intentaran llevar adelante un ajuste de cuentas contra marroquíes.Según recordó el delegado del Gobierno, "para cualquier ciudadano que se encuentre en la ciudad, como también los españoles, su derecho de manifestación está regulado por las leyes y no se tolera ningún tipo de alteración por parte de nacionales y tampoco por parte de ciudadanos en definitiva inmigrantes ilegales".

Los argelinos refugiados en Melilla se sienten agraviados respecto a los centroafricanos que han podido trasladarse a la Península. Afirma Beamud: "Con los argelinos habrá también solución, pero, desde luego, no habrá solución posible para ninguno si continuamos en las mismas circunstancias, para ninguno de los que pretendan convertir la calle en un lugar de inseguridad".

En tono contundente, Beamud insistió: "No se va a tolerar ninguna conducta anómala y cualquiera de los inmigrantes argelinos que cometan algún tipo de acto presuntamente delictivo va a ser detenido y puesto a disposición judicial y, si se le puede expulsar de nuestro país, se le va a expulsar también. A todos aquéllos que no se atengan al ordenamiento jurídico de nuestro país y nuestra ciudad".

Respecto a las obras para hacer más impermeable la frontera con Marruecos, Beamud habló de "reforzar el perímetro fronterizo". Según aseguró, se levantará una valla, pero para ello se requieren trabajos preliminares, "un muro pequeñito, perdón por la palabra, para construir la valla".

El delegado también centró los tres ejes de la política del Gobierno sobre la inmigración: lucha implacable contra las mafias organizadas que se dedican al tráfico de personas, control férreo del perímetro fronterizo y trato humanitario a las personas que entran de forma ilegal a pesar de haber adoptado las medidas anteriores. Con sentido realista, considera Beamud que "siempre entrarán inmigrantes en Melilla".

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