La obra de Chema Cobo, abre el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo
El museo aprovecha el espacio de la Cartuja de Sevilla
El jocker, irónico y juguetón, ha cumplido una vez más su papel de comodín en la inauguración del Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (CAAC), una de las asignaturas pendientes de la Junta de Andalucía. La mano de Chema Cobo (Tarifa, Cádiz, 1952) ha hecho el milagro y su versátil comodín, una figura que aparece continuamente en sus obras, ha hecho posible que se abriera ayer en Sevilla el CAAC sin que el público pueda contemplar aún su colección permanente. El centro será un escaparate del arte andaluz a partir de la década de los setenta, sin olvidar las figuras internacionales.
"La niña nace con todos los parabienes", dijo ayer Carmen Calvo, consejera de Cultura, antes de que el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, inaugurase la nueva sede del arte contemporáneo, en el monasterio de la Cartuja de Santa María de las Cuevas, con un concierto del compositor sevillano Manuel Castillo.Chimeneas, hornos, campanarios y olivos rodean los nuevos espacios dedicados al arte de nuestro siglo dentro del complejo de la isla de la Cartuja. El monasterio cartujo del siglo XIV y la intervención, tras la desamortización, de la fábrica de loza y azulejería que invadió el británico Pickman se convirtieron en el símbolo de la Expo 92 y del futuro de la ciudad de Sevilla, con las reformas planteadas por arquitectos como Guillenno Vázquez Consuegra, José Ramón y Ricardo Sierra, Roberto Luna y Francisco Torres. Frente al espectáculo de Isla Mágica -el parque temático que ha heredado el terreno de la isla- se accede al circuito del arte actual junto a los espacios ya ocupados por el Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico y el área monumental que recorren escasos turistas.
La consejera de Cultura se confesó satisfecha por haber conseguido, tras un rifirrafe con los titulares de otras consejerías, unificar dos de los principales objetivos de su negociado: conservar el patrimonio -en este caso el conjunto monumental de la Cartuja- e incorporar el arte contemporáneo a los intereses culturales de Andalucía. La apertura, con una amplia exposición de Chema Cobo, se identifica con el contenido del centro: "No hacer nacionalismo ni chovinismo".
El director del centro, el periodista y crítico de arte José Antonio Chacón, incorporado al proyecto hace apenas tres semanas, señaló que se pretende hacer una reflexión colectiva en tomo al arte contemporáneo y, a largo plazo, mostrar la colección permanente tras un amplio debate público para confeccionar un plan director. Chacón, que también pondrá en marcha proyectos formativos para que el público aprenda a conocer y apreciar el arte contemporáneo, aplazó hasta principios de 1999 la exhibición del fondo permanente del CAAC.
Los fondos de los que hasta ahora dispone el centro incluyen artistas de casi todo nuestro siglo, unas 1.300 obras nacionales e internacionales. Las piezas provienen del Museo de Arte Contemporáneo de Sevilla y de los fondos adquiridos por el CAAC y ofrecen una panorámica de los últimos 30 años de creación, desde las compras del Ministerio de Cultura hasta las recientes inversiones millonarias de la Junta. Chema Cobo, premio Andalucía de Artes Plásticas 1995, abre el centro con la exposición El laberinto de la brújula, con 150 obras, entre pinturas, dibujos e instalaciones, desde los años setenta de la Nueva figuración madrileña. Para el pintor, la figuración queda en el recuerdo, sin nostalgias. "Es una exposición muy nómada, ya desde el título, que coincide con mi forma de ser y con la situación del artista en la sociedad del espectáculo. No pinto por estados de ánimo ni por expresar sentimientos; soy un pintor más cerebral, que invierto más en planteamientos de la obra que en su ejecución. El origen es más literario y narrativo y la imagen aparece como en una polaroid". El comisario de la muestra, el crítico Fernando Castro, dijo que el primer título de la exposición era Una década de amnesia, por la pintura de Cobo, más conocida en el extranjero que en España.
El centro tiene la programación cerrada para los próximos seis meses. Durante este mes se abrirán al público otras dos muestras temporales, las de la pintora andaluza Victoria Gil y las fotografías de Irving Penn, y están también anunciadas la colectiva internacional Islas y las de Juan Luis Moraza y Esther Ferrer.
Babelia
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