Albright viaja a Europa en busca de apoyos para una operación de castigo contra Sadam Husein

El contencioso de Irak con EE UU puede pasar en breve al terreno militar. La secretaria de Estado norteamericana, Madeleine Albright, viaja hoy hacia tres capitales europeas: Madrid, Londres y París. Su objetivo es generar el apoyo político y militar necesario para realizar una operación de castigo contra él régimen de Sadam Husein. Washington quiere dar un escarmiento al presidente iraquí. Clinton lanzó anoche durante el discurso sobre el estado de la Unión un serio aviso a Sadam al advertir que EE UU está decidido a impedir que desafíe de nuevo al mundo

"Usted ha utilizado armas de destrucción masiva antes. Nosotros estamos dispuestos a impedirle que lo haga otra vez", dijo el presidente ante las dos Cámaras del Congreso. La negativa de Irak a permitir el acceso de los inspectores de la ONU a determinados lugares estratégicos ha colmado la paciencia estadounidense.La gira de Albright casi coincide con la llegada ayer por la tarde a Bagdad de un emisario ruso, el diputado Víktor Posuvaliuk. El presidente Borís Yeltsin le ha encargado, mediar en el conflicto y tratar de convencer a las autoridades iraquíes para que no pongan traba alguna a los expertos en desarme de Naciones Unidas, incluso en el acceso a los palacios presidenciales.

Albright efectuará una escala especial en Madrid. En la capital de España, aparte de reunirse con las autoridades españolas, se entrevistará con el ministro ruso de Exteriores, Yevgueni Primakov, también de gira europea pero con el objetivo contrario: evitar el ataque militar. Primakov llega esta tarde a Madrid procedente de París. Un alto funcionario norteamericano declaró a Reuters que la enviada del presidente Clinton partirá esta noche en dirección a Europa, pero el Departamento de Estado no quiso precisar más detalles. El encuentro de Albright con Primakov es previsible que se celebre mañana. También el secretario de Defensa norteamericano, William Cohen, tiene previsto consultar con los aliados europeos y realizar un viaje al golfo Pérsico a principios de febrero, anunció anoche el Pentágono.

Esta batalla política por ganar adeptos a la solución militar también se libra en el Golfo. EE UU ha iniciado una operación para explicar a las autoridades de las monarquías de la región las características de un supuesto ataque limitado contra Irak. Los diplomáticos norteamericanos enviados tratan de convencer a sus aliados históricos de la necesidad de efectuar una operación contra el Sadam y enciendo así sus reticencias demostradas en noviembre, cuando en una situación similar todos los países árabes, incluido Kuwait, lo desaconsejaron.