Microsoft y la Administración de EE UU se enfrentan en un tribunal

, El Departamento de Justicia de Estados Unidos y el gigante de la producción de programas Microsoft se enfrentaron ayer en una primera sesión celebrada en el tribunal federal de Washington por el funcionamiento del sistema de navegación en Internet denominado Explorer.

Ambas partes deben demostrar la validez de sus respectivos argumentos, tras una decisión preliminar del juez Thomas Jackson que instó a Microsoft a probar que Explorer no puede -como afirma la empresa- ser separado del sistema Windows 95 sin dañarlo hasta dejarlo inservible.

Un primer testigo presentado por la Administración, el consultor Glen Weadock, se esforzó en mostrar que se puede sacar el Explorer de la última versión de Windows. Según el consultor, basta utilizar un procedimiento incluido en Windows llamado "agregar/retirar programas" para borrar el programa de navegación Explorer.

Antes de la intervención de ese testigo, el abogado de Microsoft afirmó que esa maniobra retiraría sólo una mínima parte del Internet Explorer. "Solamente se borran las rutas de acceso a las funciones de Internet, pero la tecnología de base del Explorer permanece", explicó. Y agregó que, si se retirara el Explorer en su totalidad y los componentes de Windows conectados al mismo, quedarían afectadas otras partes del sistema de explotación, principalmente las que permiten conectarse no sólo a Internet, sino a todas las redes.

Hay mucho en juego en la vista iniciada ayer. El Departamento de Justicia acusa a Microsoft de violar la ley anti monopolio, aprovechando su dominio del mercado de la microinformática para apoderarse del mercado de Internet. Microsoft está acusado de obligar a los constructores de computadores a instalar en ellos su explorador de Internet simultáneamente con Windows 95, amenazándoles, en caso contrario, con retirarles la licencia sobre el sistema de explotación. Para Microsoft, la integración de Explorer es un progresó que interesa al consumidor.