La ordenación laboral del INAEM paraliza diversos centros teatrales

, El Museo Nacional de Teatro se encuentra cerrado desde ayer; la Compañía Nacional de Teatro Clásico ofrece en sus oficinas un panorama desolador; el Centro de Documentación Teatral está sin director y prácticamente sin personal; la Escuela de Tecnología Teatral está cerrada, con la directora y la totalidad del profesorado despedido. En La Zarzuela, el director adjunto tiene que abrir las puertas del teatro. El Ballet Nacional está sin gerente. Diferentes unidades de producción del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM) se encuentran en una situación caótica a causa del cese de numerosos trabajadores a los que no se ha renovado contrato ni se ha sustituido

Un importante número de trabajadores, que diversas fuentes sitúan cerca del centenar, se han ido al paro sin ser sustituidos, mientras el Ministerio de Administraciones Públicas (MAP) hace un estudio para ver qué puestos de trabajo son imprescindibles con el fin de cubrirlos con funcionarios o con trabajadores por obra o servicio. Responsables de estos organismos señalan que no critican que se reorganice de una vez por todas la plantilla del INAEM, muchos de cuyos trabajadores tenían contratos irregulares, pero denuncian la precipitación e improvisación del Ministerio de Educación y Cultura.Según reconoció hace ya más de seis meses Tomas Marco, director general del INAEM, la situación era conocida por Cultura, dado que el MAP les había advertido de la ilegalidad de muchos contratos del INAEM. "Esta reforma ya iniciada lleva su tiempo", declaró ayer un portavoz del INAEM.

La Compañía Nacional de Teatro Clásico se encontró con que el 1 de enero tuvo que prescindir de dos secretarias, el gabinete de prensa y comunicación en pleno, telefonistas, auxiliar de sala, ayudante de producción, ayudantes de dirección escénica... Rafael Pérez Sierra, que antes de ocupar la dirección de esta compañía fue director general de Teatro con UCD, piensa que la reordenación de la plantilla del INAEM era necesaria, pero no entiende, en cambio, por qué se aborda de esta manera: "Me quejo de la imprevisión. Yo me alarmé ante la situación en que se. quedaba la compañía el pasado día 1, ya que en esas condiciones era imposible representar; en principio me autorizaron a hacer contratos de quince días con el fin de no dar la sensación de que todo está manga por hombro, y ahora me dejan contratarlos por obra". Asimismo, señala que se ha convertido en telefonista, puesto que también se ha quedado sin cubrir: "Eso lo sé hacer, pero en cambio no disponemos de secretaria y yo sólo sé escribir con bolígrafo", dice.

Sin taquilleras

La Escuela de Tecnología del Espectáculo permanece cerrada tras el despido se su directora,Teresa Valentín, y todo el profesorado. En el Teatro de la Zarzuela la situación también se hizo angustiosa cuando se vio que se había anunciado la venta de entradas: "Por quitar habían echado hasta a las taquilleras", dice un portavoz del teatro, que cuenta que se resolvió el problema, para no cerrar el teatro, contratando taquilleras por quince días. "Tenernos especialistas que llevan años formándose y ahora pueden ser sustituidos por bailarines o funcionarios cuyo oficio no tenga nada que ver con el que vengan a ejercer", dicen en este teatro. "Como han echado a los porteros se ha dado el caso de que ha tenido que venir a abrir las puertas el director adjunto".En el Centro de Documentación Teatral no hay responsable, ya que la directora ha sido despedida junto con siete trabajadores, de los quince que en total tiene este centro. Estos días se trabaja sólo por la mañana. El Museo Nacional del Teatro no ha soportado el envite y tiene sus puertas cerradas a cal y canto. De hecho, el único empleado que ha quedado en este museo que estos días ofrecía, junto a su colección estable, una exposición sobre el teatro Real, es Andrés Peláez, su director. "A mí esto no me lo arregla ni la paz ni la caridad antes de un mes y la situación es muy delicada", dice Peláez. "No sólo he tenido que suspender las numerosas visitas solicitadas, sino otras muchas actividades, entre ellas la preparación de una exposición de Francisco Nieva y otras sobre el centenario de García Lorca, la generación del 98 y el Festival de Teatro Clásico".