Argelia rechaza la injerencia exterior en la crisis
, El Gobierno argelino ha reaccionado con hostilidad a los repetidos intentos de intervención extranjera en la crisis que sacude el país desde hace seis años y que se ha cobrado cerca de 100.000 muertos entre la población, desprotegida ante los ataques terroristas de las bandas armadas. La Unión Europea (UE) declaró ayer que el conflicto tiene una dimensión internacional y se propone enviar una misión diplomática tras los últimos actos de barbarie de la pasada semana, que han dejado un saldo de 600 muertos. Ayer se supo que otras 62 personas fueron asesinadas el lunes por la noche en la provincia occidental de Relizán, en el mismo escenario de las últimas matanzas.
El régimen de Liamín Zerual declaró ayer "no haber solicitar do ningún tipo de ayuda" en respuesta a las últimas propuestas de la UE y condenó los "crímenes bárbaros" cometidos en los últimos días reiterando su "firme" rechazo a toda "injerencia" internacional. Sin embargo, EE UU, por boca de James Rubin, portavoz del Departamento de Estado, aseguró ayer que el Gobierno argelino ha aceptado "en principio" la idea de Washington de que el relator de derechos humanos de la ONU estudie las matanzas indiscriminadas de civiles.La recién estrenada presidencia británica de la UE propondrá hoy a sus socios en Bruselas enviar una troika diplomática a Argelia. Su misión será triple: informarse sobre el terreno; "lanzar una señal al Gobierno argelino de nuestra profunda preocupación" por lo que sucede en ese país; y ofrecer su "asistencia técnica" para repararla en lo posible, informó ayer el secretario del Foreign Office, Robin Cook. La iniciativa ya aireada por su colega alemán Klaus Kinkel cuenta en principio con todas las posibilidades de prosperar. Cook rechazó de plano el argumento de Zerual según el cual la violencia en Argelia es un asunto interno. "Si permitimos que el terrorismo se instale en un país, podrá exportarse hacia otros, como ha sucedido en varios casos". Replicando frontalmente al líder argelino, el presidente de turno dela UE afirmó esperar que la misión "sea recibida enseguida por el Gobierno de Argel". Recordó que ya una delegación de la ONU ha viajado al país. Ése es un precedente tanto más valioso por cuanto Europa "mantiene relaciones económicas especialmente estrechas con Argelia", advirtió en lo que constituye una muy velada amenaza sobre la continuidad de la cooperación económica comunitaria.
Pero el envío de la troika no es suficiente, constituye sólo un primer paso" del compromiso europeo en la necesi dad de pacificar Argelia. Londres se propone también que los Quince envíen a sus respectivos embajadores en visita de inspección a la zona más conflictiva. Hasta ahora la UE ha limitado su estrategia al ámbito de la pura presión diplomática. En el último Consejo informal de Asuntos Generales (ministros de Exteriores) celebrado el pasado trimestre, los responsables diplomáticos comunitarios optaron por apoyar los pasos dernocratizadores emprendidos por el régimen, pese a constatar sus enormes limitaciones.
El presidente Jacques Chi rac ha declarado sentirse profundamente conmovido por los últimos episodios de barbarie y ha anunciado que Francia desea ofrecer "ayuda y cooperacion". François Leotard, ex ministro de Defensa francés, ha calificado las matanzas como "crímenes de guerra" y propone que sean juzgadas por un tribunal especial como el creado en La Haya para los desmanes cometidos en Bosnia.
Los países árabes, que hasta el momento se habían abstenido de intervenir, comienzan a romper el silencio. El diario gubernamental saudí Al Yazira ha pedido a Argelia que acepte la ayuda de la comunidad árabe "para desenmascarar a los autores de las masacres".
La oposición política argelina, que apoya las diferentes iniciativas occidentales de intervención en la crisis, se pronuncia a favor de negociaciones entre el Gobierno y las fuerzas democráticas. El ex presidente Ahmed Ben Bella estima que la única solución duradera a la crisis reside en el diálogo "entre el Gobierno y el Frente Islámico de Salvación (FIS)". Posición similar a la de Hocine Ait Ahmed, líder del Frente de Fuerzas Socialistas, que considera "irremplazable abrir el diálogo con las fuerzas que rechazan la violencia".
La única medida tomada hasta ahora por el régimen de Zerual para proteger a la poblacion argelina es la de distribuir armas y formar "milicias de autodefensa".
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