Un senador viaja a Florida para visitar al español condenado a muerte

Manuel Jaén Palacios, senador del PP por Baleares, viajará el martes a Florida para entrevistarse en el corredor de la muerte de la prisión de Starke con Joaquín José Martínez, el primer español condenado a la pena capital en Estados Unidos en las últimas décadas. "Me mueve la defensa del derecho a la vida", dice Jaén Palacios. Miguel Díaz Pache, cónsul español en Miami, le acompañará en la entrevista, prevista para el viernes.El senador, en una conversación telefónica con el corresponsal de EL PAÍS en Estados Unidos, ha declarado que no quiere que las autoridades norteamericanas interpreten sus gestiones como una injerencia en sus asuntos judiciales internos. Con la misma precaución actúa Díaz Pache, que se está enfrentando a obstáculos burocráticos por parte de las autoridades de Florida en el ejercicio de su derecho a la atención consular a Martínez y otros ciudadanos españoles que viven en ese Estado.

"Lo que pretendo es transmitirle al condenado el sentimiento de preocupación que su caso ha provocado en muchos compatriotas", dice Jaén. "Y también quiero recordar a la opinión pública norteamericana que en España no existe la pena de muerte".

El senador, que se intereso por el caso alertado por un hermano suyo que vive en Miami, ha sostenido en las últimas semanas diversos contactos con la dirección general de Asuntos Consulares y la embajada de Estados Unidos en Madrid. Durante su estancia en Florida también se reunirá con los padres y el abogado de Joaquín José Martínez y -"en un intento por interesar en el caso a la numerosa comunidad hispana que vive en Florida"- se entrevistará con varios medios informativos.

El pasado abril un jurado popular de Tampa condenó a Joaquín Martínez a morir en la silla eléctrica del Estado de Florida llamada Old Sparky. El jurado le encontró culpable del asesinato de una pareja residente en esa localidad. Un juez confirmó en mayo esa decisión y desde entonces Martíñez, que proclama su inocencia y atribuye su suerte a una mala defensa, está internado en Starke. Su caso será revisado en la segunda mitad de este año por el Tribunal Supremo.