Ardanza dice que si ETA calla podrá integrarse en el futuro de Euskadi

El lehendakari José Antonio Ardanza pidió a ETA en su discurso de fin de año que abandone definitivamente las armas a cambio de la generosidad de un pueblo capaz de ''integrar a la izquierda abertzale en la pluralidad de proyectos con que todos defendemos la construcción de Euskadi".

Ardanza destacó que el entorno de ETA está desorientado y frustrado porque muchos de los seguidores de. HB no entienden ni el sentido ni la finalidad de la violencia. En su último discurso de fin de año como lehendakari, lejos de incluir alguna referencia crítica hacia el Gobierno dé José María Aznar, aplaudió el acuerdo sobre el Concierto Económico "porque disponemos'.', dijo, "de la misma soberanía fiscal y financiera que cualquier Estado de Europa".El lehendakári acudió al contenido del Pacto de Ajuria Enea, que este año celebrará su décimo aniversario, y planteó a los terroristas la oferta de generosidad que todos los partidos políticos democráticos lanzaron con la firma de aquel acuerdo, en febrero de 1988. ."Si ETA calla, la sociedad será generosa", afirmó. Además pidió a ETA que dé la palabra al pueblo vasco. "Nosotros como demócratas nunca se la vamos a poder negar. Que se la den también quienes pretenden silenciarla con el ruido de las armas".

El lehendakari recordó el asesinato del concejal del PP Miguel Ángel Blanco y el secuestro del funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara, y puso como contrapeso la reacción de una sociedad "que no se resigna a convivir con actos de tamaña crueldad". ETA "sobra y estorba", dijo cuando van a cumplirse treinta años desde el primer asesinato de la banda, porque aparte de muerte "no ha aportado nada ni a Euskadi ni a quienes han provocado tanto dolor".

El lehendakari se refirió a la violencia como una de las sombras que han permanecido durante los trece años al frente de la Administración vasca. También alertó sobre el peligro de convertir el desempleo que sufren "demasiados hogares" del País Vasco en algo permanente. En su opinión, el crecimiento económico podría convertirse "en un motivo de vergüenza para todos" si no es capaz de absorber toda la capacidad de trabajo de la población activa vasca. Un trabajo para el que pidió un especial esfuerzo de solidaridad tanto a los sindicatos como a los empresarios.

Ardanza, lejos de criticar al Gobierno de José María Aznar, elogió los acuerdos logrados con el Ejecutivo central, porque han proporcionado, dijo, un nivel de autonomía financiera y fiscal comparable a los de cualquier Estado europeo.

Reacciones

El presidente del PP en el País Vasco, Carlos Iturgaiz, reprochó a Ardanza que en su análisis sobre la buena situación económica y las mayores cotas de autogobierno para Euskadi no hubiese tenido en cuenta la influencia que en todo eso ha tenido la política del Gobiemo central y el cumplimiento de los compromisos pactados entre el PNV y el PP. Sobre la violencia en Euskadi, el líder de los populares vascos pidió a los partidos que se esfuercen en mantener la unidad contra el terrorismo.Para el secretario general de los socialistas vascos, Nicolás Redondo Terreros, el discurso del lehendakari se enmarca en el denominado Espíritu de Ermua. Redondo también coincidió con Ardanza a la hora de dar importancia a la consecución de un pacto entre los agentes sociales para que la bonanza económica repercuta en la creación de puestos de trabajo.

Javier Madrazo, coordinador de IU en el País Vasco, apoyó la parte de la intervención de Ardanza referida a la violencia, pero le reprochó que ante el grave problema de desempleo que existe en la sociedad vasca "eche balones fuera". Madrazo reiteró la "necesidad imperiosa de que ETA escuche de una vez por todas el clamor popular de la sociedad vasca y propicie el cese de la violencia".

Más crítico estuvo el socio de gobierno del PNV y PSE-EE. La portavoz de Eusko Alkartasuna (EA), Igone Martínez de Luna, aseguró que el discurso del lehendakari refleja "impotencia" ante la violencia y resulta "repetitivo". El portavoz de Herri Batasuna Joseba Permach calificó de "virtual y fuera de la realidad" la intervención del presidente vasco. Permach acusó a Ardanza, a través de un comunicado, de haber escondido "la cruda realidad" de Euskadi. "Sin embargo, no puede esconder que la gestión del lehendakari y del PNV no ha hecho más que aumentar la unión y el sometimiento. a España".

El secretario general de Unidad Alavesa (UA), Pablo Mosquera, agradeció a Ardanza que en su discurso de fin de año se acordara de las víctimas del terrorismo de hace 30 años, demostrando así que "se puede ser nacionalista y actuar como auténtico representante del Estado en el País Vasco". "Es una novedad muy importante que se haya acordado, con nombres y apellidos, de víctimas del terrorismo entre ellos el guardia civil José Pardines, primera persona asesinada por ETA y le felicitó porque demuestra que actúa como auténtico representante del Estado en el País Vasco, recordando a todas las víctimas, incluso aquellas que después de 30 años probablemente sólo sean recordadas por sus familiares", añadió.

Otros discursos

La lucha contra el paro y los efectos de los últimos temporales fueron algunas de las cuestiones que protagonizaron los mensajes de fin de año dirigidos por los presidentes autonómicos en el último día del año. Las consecuencias de las inundaciones constituyeron uno de los ejes centrales de los mensajes de los presidentes andaluz, Manuel Chaves, y extremeño, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, quien afirmó que la solidaridad recibidas tras las riadas le demostraron que "Extremadura es una región unida" y que "España existe", aunque se hagan "esfuerzos muchas veces por demostrar lo contrario".Chaves aseguró el apoyo del Gobierno andaluz a los pueblos y ciudadanos afectados por las inundaciones y se refirió también a los niños y mujeres maltratadas, así como a la necesidad de mejorarlos niveles de bienestar y potenciar la creación de empleo, sobre todo entre los jóvenes.

También el presidente de la Generalidad Valenciana, Eduardo Zaplana, dedicó una parte de su intervención a los afectados por las riadas y, entre otras cuestiones, defendió la necesidad de mantener vivo el espíritu de Ermua frente a la violencia terrorista y mostró su compromiso con la lucha en favor de la creación de empleo.

En Galicia, el presidente de la Xunta, Manuel Fraga, llamó a los gallegos a defender unidos sus señas de identidad "sin fanatismo, pero con absoluto convencimiento", expresó su disposición a dedicar el "máximo esfuerzo" a la lucha contra el paro y dedicó un recuerdo especial a los emigrantes y a los pescadores.

El presidente aragonés, Santiago Lanzuela, destacó en su mensaje de fin de año las muestras de solidaridaridad de los ciudadanos en respuesta a los "viles asesinatos" de ETA, dedicó una mención específica a la labor de la Brigada Aragón en Bosnia y reiteró su apoyo a la familia de Publio Cordón, secuestrado por los GRAPO en 1995.