Gracias, Bilbao
Acabo de pasar unos días, junto con mi esposo, en tierras vascas (como tantos otros fuimos a ver el museo recién inaugurado, y que es una maravilla tanto por dentro como por fuera) y apenas tengo palabras para expresar mi emoción y mi reconocimiento a esa tierra dulce y cálida; pero sobre todo a sus gentes por ser amables, cariñosas y acogedoras.En todo lugar, y en todo momento, nos sentimos como en casa porque ellos no han perdido muchas de esas cosas entrañables que tanto echamos de menos en las relaciones humanas y que, por desgracia, apenas existen ya en las grandes ciudades. Muchas veces nos dejamos manipular por las informaciones que nos llegan; deformamos los sentimientos y perdemos de vista lo esencial. Por eso no quiero dejar pasar la ocasión para decir alto y claro, una vez más, unida a tantas voces que no se dejan engañar: sí, al pueblo vasco. Os doy las gracias por este viaje maravilloso, por vuestros logros, por vuestros parques y museos, por vuestra tierra y, repito, sobre todo, por vuestras gentes. Volveremos.-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.