_
_
_
_
_

El oro nazi y la justicia biológica

España se agarra a los acuerdos de hace 50 años para sostener su inocencia

José María Irujo

ENVIADO ESPECIAL"Lección histórica", "honestidad" "justicia", "deuda". Stuart Eizenstat, presidente de la delegación norteamericana en el Congreso Mundial sobre el oro nazi celebrado esta semana en Londres, no ahorró frases para intentar convencer a los 240 delegados de los 41 países participantes para que se sumaran al fondo creado por el Reino Unido y Estados Unidos en favor de los supervivientes del Holocausto. Pero sus palabras se perdieron en los enormes salones del palacio Lancaster House, sede de la cumbre.

El reiterado mensaje del subsecretario de Comercio de Bill Clinton, repetido por Robin Cook, ministro de Exteriores del Reino Unido, sólo arrastró a ocho países. Suiza alegó que ha creado su propio sistema de restitución. Y otros importantes, como Francia, Italia, Holanda o España declinaron entrar al fondo de compensación. Casi nadie quería hablar de pagar. ¿Por qué ha tenido el fondo tan escasa respuesta?. Enrique Múgica, presidente de la delegación española, respondía así: "No se puede hablar de culpabilidad colectiva. Antes de aportar dinero hay que delimitar las responsabilidades. De nuestros estudios no se deduce ninguna".

Al contrario que Francia o el Vaticano, España ha abierto todos sus archivos, sin excepción. Y el informe español elaborado por el catedrático Pablo Martín Aceña concluye que no hay responsabilidad en las compras de oro del Gobierno de Franco entre 1939 y 1945. Un total de 65.502 kilos de los que 38.000 se adquirieron a Suiza, mayor comprador del oro robado.

¿Ese oro comprado a los suizos era oro robado por los nazis?. En esa pregunta se resume la posible implicación española en esta oscura historia. Según Martín Aceña, nada ha acreditado, por ahora, que fuera así. "¿Todas las barras que se compraron eran de oro nazi?. No lo sabemos. Algunas podrían serlo y otras no. También podían ser barras alemanas de otros años".

El historiador Slany, autor del primer informe Eizenstat, sostiene lo contrario. Para él casi las tres cuartas partes del oro adquirido por Franco a Suiza procedían del saqueo nazi: Para ello se basa en informes de 1946 del espionaje norteamericano.

Martín Aceña no niega el rigor de los informes de Slany, pero argumenta que los aliados, al concluir la guerra, fiscalizaron lingote a lingote, las 4.379 barras compradas durante ese periodo y sólo descubrieron ocho que procedían del expolio nazi. "¿Por qué firmaron este acuerdo y no reclamaron más?", se pregunta el historiador español. La polémica entre España y EE UU está servida.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Eizenstat, disparó su último cartucho durante la clausura. "Este es un problema biológico", dijo refiriéndose a la avanzada edad de los supervivientes del genocidio. ¿Llegarán a conocer un acuerdo los 300.000 supervivientes del Holocausto?. Nadie contesta a esta pregunta.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

José María Irujo
Es jefe de Investigación. Especialista en terrorismo de ETA y yihadista, trabajó en El Globo, Cambio 16 y Diario 16. Por sus investigaciones, especialmente el caso Roldán, ha recibido numerosos premios, entre ellos el Ortega y Gasset y el Premio Internacional Rey de España. Ha publicado cinco libros, el último "El Agujero", sobre el 11-M.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_