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El ruido de los colegios de San Fernando rebasa lo saludable

Los ocho colegios de San Fernando superan el límite de 55 decibelios que la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera saludable para zonas residenciales. Las aulas de uno de los centros, el Villar Palasí, registra medias de 80 decibelios con picos de hasta 110, según un estudio municipal. Las causas: los edificios no cumplen la normativa sobre insonorización, los escolares no son precisamente silenciosos y muchos colegios están situados bajo las rutas de los aviones del aeropuerto de Barajas. El Villar Palasí, además, está junto a la carretera de Mejorada (M-216).El estudio sobre el ruido de los centros escolares de San Fernando se realizó entre abril y junio gracias a un convenio con el centro de formación profesional Siglo XXI de Leganés. Tres alumnas de la rama de Salud Ambiental recorrieron los centros con un sonómetro (un aparato para medir el ruido) y lo instalaron en distintos puntos. Diez minutos en una aula vacía, 10 durante una clase, otros 10 en el recreo, luego en el patio desierto, en el exterior, en la biblioteca... así hasta un centenar de mediciones.

Hay bastante diferencia entre la contaminación acústica que soporta un colegio como el Jarama, alejado de la carretera y de la ruta aérea, que registró 56 decibelios en el exterior, y uno que soporta el paso de los aviones como el Olivar (66,6 decibellos) o el Villar Palasí (89,6).

Este estudio es el primer paso del mapa de ruidos que va a acometer el consistorio. Los autores del estudio compararon los datos obtenidos en los colegios sanfernandinos con mediciones efectuadas en la plaza Mayor del vecino Torrejón (que es una zona exclusiva de peatones). El sonómetro marcó es esta calle 58 decibelios.

Drogas de síntesis

Por otra parte, el Ayuntamiento sanfernandino está repartiendo en bares y tiendas de discos y ropa para jóvenes de 18 a 25 años 5.000 folletos con el tamaño de una invitación de discoteca, una estética bacaladera y una pregunta: "¿Tienes que tragar con esto para divertirte?". Esta iniciativa forma parte del programa de prevención del consumo de drogas de síntesis elaborado por la Concejalía de Servicios Sociales y la asociación Grupo Interdisciplinar de Drogas (GID). Quince jóvenes voluntarios se encargarán del reparto de los folletos este fin de semana y el anterior a las fiestas de Navidad, unas fechas en las que suele aumentar el consumo de esos excitantes.La campaña tiene como objetivo convencer a los que nunca han probado el éxtasis, el speed, el LSD u otro tipo de pastillas de que no empiecen a hacerlo; disuadir a los que consumen de que lo dejen y concienciar a los que no están dispuestos a abandonar esta práctica de que adopten medidas que reduzcan los daños que les pueda ocasionar. Habrá una segunda ofensiva para adolescentes de entre 14 y 18 años basada en un cartel con el lema: "Lo que nos hacen tragar sobre el éxtasis y otras pastillas".

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