Miguel Ángel Cortés elogia parcialmente la gestion de Carmen Alborch

Dentro del ciclo España 20 años de democracia, organizado por el Museo de la Ciudad, el secretario de Estado para la Cultura, Miguel Ángel Cortés, pronunció anoche una conferencia donde no escatimó elogios a algunas decisiones y proyectos realizados durante la etapa socialista, pero que habían sido gestados o comenzados en la letra en los tiempos de UCD, como el Museo Nacional Reina Sofía y las leyes de patrimonio y la de la propiedad intelectual. Cortés hizo un poco de historia con datos como que el Ministerio de Cultura se creó el 4 de julio de 1977, y que poco después perdió su apellido de "y de Bienestar". A continuación apostilló que "sería un disparate pensar que el ejercicio democrático empezó en España en 1977, aunque aquí me voy a ceñir a la etapa entre 1977 y 1982, en que UCD hizo una gran labor en el terreno cultural' donde se apuntaron líneas decisivas que se desarrollarían en el futuro, creando un continuum". Otro detalle poco conocido es que la primera Secretaría de Estado para la Cultura se creó en aquellos días y solamente duró hasta 1979, siendo Gabriel Cañadas su titular en los tiempos en que era ministro Pío Cabanillas. En su recorrido por algunos hitos culturales de estos 10 años, citó Cortés la cuota de pantalla, a la que calificó de "aberración" y que data de 1978, así como la creación del Centro Dramático Nacional ese mismo año. Con relación a las artes plásticas citó las antológicas de Miró (1979) y Tàpies (1980), así como el homenaje a Picasso en 1981. Sobre el cine, también expresó Cortés, como "una opinión muy personal" que la subvención anticipada a las películas le parecía nociva.Al llegar a la gesta de la colección Thyssen, Cortés aclaró que "gracias al acuerdo facilitado por José María Aznar, entonces jefe de la oposición", se pudo llegar a buen puerto con la asimilación a España de la fabulosa colección de arte, y no escatimó palabras de elogio para la entonces Ministra de Cultura del gabinete socialista, Carmen Alborch "a la que corresponde el mérito de la sensatez en la gestión de la colección".

Para terminar, el Secretario de Estado dijo, con cierto tono de humor que la realidad cultural española está mucho mejor que la política", y bocetó "la ausencia de un verdadero gran proyecto cultural español". Al hilo de ello, Cortés dijo: "El español es nuestra principal materia prima; tal como otros tienen el petróleo, nosotros tenemos el idioma. Somos una verdadera potencia cultural".