Los afectados de Down critican que la Administración no les contrate

El VI Congreso Mundial sobre el Síndrome de Down arrancó ayer en Madrid con una escena conmovedora. Ante más de 2.000 participantes, un afectado, Pablo Pineda, de 23 años, universitario, interrumpió al ministro de Trabajo, Javier Arenas, para preguntarle: "¿Qué va a cambiar?". La Federación de Síndrome de Down se quejó de que la Administración incumpla la ley que obliga a contratar a un 2% de minusválidos.

Aliné Fávaro, brasileña, de 17 años, y con síndrome de Down, paseaba ayer su delicada figura, envuelta en una malla negra, por el Palacio de Congresos de Madrid entre los participantes llegados de 60 países. Aline estudia y además baila en el Ballet Clásico de Sâo Paulo (Brasil). Su sueño es convertirse en la mejor artista". Y vivir de ello. No lo tiene muy difícil: es la única que baila con zapatillas de puntas.Más complicado lo tienen los más de 30.000 deficientes que hay en España. La primera puerta del mercado laboral que se les cierra es la de la Administración, según criticó Francisco Astudillo, director gerente de la Federación de Instituciones Síndrome de Down (FEISD), organizadora del congreso. "Todas incumplen la ley que les obliga, con más de 50 trabajadores fijos, a contratar a un 2% de minusválidos; nos gustaría que hubiera más sensibilidad". Astudillo propuso que se contrate a afectados de Síndrome de Down mediante el sistema de libre designación, para que no queden fuera porque no tienen méritos o no han opositado.

El director de la FEISD destacó que hay empresas privadas que empiezan ya a contratar a afectados, aunque atraídas por el "marketing con causa" (vender imagen de solidaridad). Habló de empresas como Telepizza, Pans and Company o Servicom, que "después, al ver que estos trabajadores son eficaces, se quedan con ellos".

El Ministro de Trabajo, que presentó el congreso bajo el lema Síndrome de Down. Sueños hechos realidad, reconoció que "mientras no se hable de integración laboral no se hablará de auténtica integración". Y anunció para 1998 un incremento del 12% en los programas de solidaridad. Este año se destinan 53.000 millones de pesetas.

El síndrome de Down es una alteración genética que afecta a 1,3 de cada 1.000 nacidos vivos. Por causas desconocidas, un error en el desarrollo celular lleva a que se formen 47 cromosomas en lugar de 46. El 80% de estos niños nacen de mujeres mayores de 35 años.