Plaza & Janés compra un 60% de la editorial argentina Sudamericana

Manfred Grebe, responsable del grupo alemán Bertelsmann en España, Portugal y Latinoamérica, confirmó ayer en la Feria del Libro de Francfort que Plaza&Janés, que pertenece al grupo, ha comprado el 60% de Sudamericana Argentina, Sudamericana Chile, de la distribuidora Melisa y de las librerías de esta empresa argentina. Además mantiene la opción de compra del resto. "El contrato no ha sido firmado aún, pero no habrá problemas. Se trata de simples formalidades", y el acuerdo será firme antes de final de año.

Sudamericana fue fundada por el catalán Antoni López Llausás, que emigró a Argentina poco antes de la guerra civil. En 1946, López Llausás creó en España Editora y Distribuidora Hispanoamericana, SA (Edhasa). Esta editorial, radicada en Barcelona, sigue perteneciendo a la familia, a cuyo frente está Gloria López Llovet, y no entra en el paquete adquirido por Bertelsmann. Sudamericana fue la mítica editorial que publicó Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez. A través de Edhasa exportó a España un número de libros prohibido durante el franquismo. Los importantes fondos de Sudamericana, de los que se ha beneficiado Edhasa, siguen siendo propiedad de los López Llovet, explicó Grebe, y Plaza&Janés utilizará una parte "para sus ediciones de bolsillo"."No habrá competencia entre Plaza y Sudamericana", dijo Grebe, "pues no editarán los mismos títulos Lo que pasa es que la oferta se alarga". No es el primer paso que da la editorial española en América Latina. En 1994, justo tres meses antes de los gravísimos problemas económicos que sufrió México, creó Plaza México. Sudamericana ya distribuía los libros de la editorial española. Grebe no quiso hablar del precio de la compra aunque fuentes del sector consideran que no ha sido muy elevado.

Por otra parte, el canciller alemán Helmut Kohl visitó ayer la Feria y, en especial, el pabellón portugués donde se entrevistó con el primer ministro de Portugal, Antonio Guterres. Los editores españoles alabaron el interés de los políticos alemanes por el sector editorial frente a la indiferencia de los españoles que no asistieron a la inauguración de la reciente edición de Líber celebrada en Madrid.

La Federación de Gremios de Editores, de España convocó ayer a los periodistas ante la llegada a Francfort de nuevas manifestaciones del Gobierno en el sentido de que los editores no quieren negociar, de que han subido excesivamente el precio de los libros de texto, de intereses y de control de márgenes y también de prácticas de acuerdos encubiertos de descuentos de algunas cadenas.

"Primero que nada", afirmaron, "no estamos para nada en contra de los consumidores, sino a favor de la cultura y de la libre publicación. Queremos que esto quede muy claro". Los editores sostienen que el Gobierno está desviando al sector editorial las reivindicaciones de los padres de alumnos, para "que los libros sean gratuitos". "Nosotros no somos ONG", añaden, "y lo que están diciendo a los libreros es que tienen que vender con pérdidas. Si el Gobierno sigue adelante con sus planes de liberalización de los precios de libros de texto unas 4.000 librerías podrían cerrar".

Argumenta también el Gobierno, señalaron los editores, que la subida media del precio de los libros de texto (2,4%) es superior al IPC general, pero se trata "de un incremento más que moderado, si se tiene en cuenta que los costes medios de salarios y de producción han subido por encima del 4,5%".