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Netanyahu reabre las negociaciones con los palestinos y descongela sus cuentas

Israel parece dispuesto a desbloquear el proceso de paz con los palestinos. El primer ministro israelí, el conservador Benjamín Netanyahu, informó ayer a sus ministros, en la reunión semanal del Gabinete, la voluntad de reabrir el diálogo con asir Arafat, interrumpido desde hace seis meses. Esta decisión ha sido adoptada en vísperas de una reunión en Nueva York, auspiciada por la secretaria de Estado norteamericana, Madeleine Albright, entre el ministro de Exteriores israelí, David Levy, y el responsable de la política exterior de la Autoridad Palestina, Abú Mazen.

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"El Gobierno israelí ha decidido volver a [tres de los siete] comités negociadores, y eso lo vemos como una señal positiva en la buena dirección", declaró ayer Marwan Kanafani, portavoz del presidente palestino, Yasir Arafat. Los asuntos que tratan esos comités son esenciales para la buena marcha del proceso paz: el puerto y aeropuerto internacional de Gaza (un futuro pulmón económico para la depauperada Autoridad Palestina), liberación de presos palestinos en Israel y paso libre entre los territorios autónomos de Gaza y Cisjordania.El cambio de posición (le Netanyahu, que se mueve entre la provocación (más asentamientos) y el diálogo (hoy, en Nueva York), puede estar basado en dos factores. La reprimenda de EE UU a su política de hechos consumados en los territorios ocupados y la detención el viernes de decenas de militantes de Hamás y de la Yihad Islámica llevada a cabo por la policía de Arafat. Estos dos grupos son los responsables de los últimos atentados en Jerusalén.

A pesar de que, en un primer momento, el entorno de Netanyahu acusó a los palestirios de llevar una operación de maquillaje para impresionar a EE- UU, ahora se cree que ésta puede ser un primera respuesta positiva de las autoridades palestinas a las las autoridades palestinas a las constantes reivindicaciones de Netanyahu sobre la necesidad de incrementar la seguridad.

Por ello, el primer ministro israelí encargó a sus colaboradores, como una prueba de su buena voluntad, la descongelación y entrega a las autoridades palestinas del 50% de los impuestos que Israel recauda en nombre del Gobierno de Arafat, y cuya transferencia quedó bloqueada el 30 de julio tras el primer atentado en Jerusalén, en el que murieron 15 israelíes.

Netanyahu dio la orden a susministros de reabrir el diálogo con los palestinos en tres de las siete comisiones mixtas establecidas en enero. Estas concesiones anunciadas por Netanyahu podrían ser consideradas insuficientes por las autoridades palestinas, que condicionan su participación en el proceso de paz a la congelación de la construcción o potenciación de asentamientos judíos en los territorios autónomos. En este punto, EE UU da la razón a Arafat; como se la da a Netanyahu en el asunto de la seguridad.La delicada cuestión de los asentamientos no fue oficialmente abordada ayer por el Gobierno israelí, que prefirió mantenerse en silencio, aunque todo parece indicar que mantiene inquebrantable su actitud inflexible. Esto se desprende de las propias declaraciones del primer ministro, que la semana pasada anunció la construcción de 300 nuevas viviendas en el área de Belén.

[Arafat sufrió hace unos días un desvanecimiento, informa la revista Time en el número quehoy se pone a la venta. El presidente de la Autoridad Palestina se desplomó durante una reunión en El Cairo con el ministro e Asuntos Exteriores de Qatar, según un responsable palestino que no quiere que se revele su identidad. Servicios de espionaje que la. revista no identifica dicen que Arafat ya ha manifestado a sus allegados que no espera llegar a cumplir 70 años. Ahora tiene 68. Los temblores de mano el líder palestino revelan los primeros síntomas de la enfermedad de Parkinson].

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