El Gobierno aprueba hoy los Presupuestos sin un acuerdo satisfactorio con los nacionalistas

El Consejo de Ministros aprobará hoy los Presupuestos Generales del Estado de 1998 sin haber alcanzado un acuerdo que satisfaga a sus socios nacionalistas catalanes y vascos. Pese a ello, CiU está abocada a votar el proyecto del Gobierno aunque sea con resignación. Las reuniones que el vicepresidente y ministro de Economía, Rodrigo Rato, mantuvo a última hora del miércoles y en la jornada de ayer con los representantes parlamentarios de CiU y PNV han distendido la actitud dura que habían mantenido sus portavoces, Joaquín Molins e Iñaki Anasagasti, respectivamente.

No habrá foto del Gobierno con sus socios nacionalistas coincidiendo con la aprobación de los Presupuestos en el Consejo de Ministros, al contrario de lo que sucedió el año pasado. El Gobierno pasó ayer a la ofensiva con sus socios de CiU y PNV para tratar de acercar posiciones antes de aprobar hoy las cuentas del Estado.Joaquim Molins (CiU) culminó anoche su negociación presupuestaria con el Gobierno sin haber conseguido de éste que incluyera para 1998 una partida extraordinaria para financiar la aplicación de la LOGSE en aquellas comunidades autónomas que ya disponen de competencias en educación, que era uno de los cinco objetivos prioritarios que se había fijado CiU. Los nacionalistas se resignan, en principio, pero siempre que el Gobierno se comprometa a aprobar más adelante una financiación extraordinaria si el Libro Blanco sobre la reforma educativa que debe elaborar concluye que se necesitan más recursos para su aplicación. Ese compromiso podría quedar recogido en la Ley de Acompañamientos de los Presupuestos.

En cuanto a la financiación de la Sanidad, los 50.000 millones anuales de más prometidos por el Gobierno para Cataluña podrían quedar recortados en un 20% -y en la misma proporción para el conjunto del sistema sanitario español- si no se encuentran en -las próximas semanas una vía de ingresos procedentes del propio sistema sanitario. El Gobierno propuso a CiU que una parte de los nuevos ingresos procediera del copago de las medicinas por los jubilados con pensiones superiores a las 100.000 pesetas, pero los nacionalistas catalanes lo rechazaron.

Mejor parada saldrá CiU en lo que se refiere a nuevas inversiones públicas en Cataluña. La mayoría de las peticiones de la Generalitat ha sido asumida por el vicepresidente Francisco Álvarez Cascos, y las que no, se pactarán en gran medida a través de enniendas negociadas por ambas partes. Este domingo Pujol deberá explicar estos resultados, insuficientes para las necesidades financieras de la Generalitat, ante el consejo nacional de su partido.

Al mediodía, el vicepresidente económico, Rodrigo Rato, se reunía con los representantes del PNV, Iñaki Anasagasti y Jon Zabalia, a los que explicó las líneas generales de los Presupuestos. Era el primer y único encuentro que ambos celebraban con Rato para abordar las líneas generales de las cuentas del Estado para 1998, pero los nacionalistas salieron contentos. Por un lado, la negociación sobre las inversiones que reclama el PNV, que protagonizan el vicepresidente político, Francisco Álvarez Cascos, y el diputado José Juan González de Txabarri, marchan "correctamente", según fuentes nacionalistas. El partido que lidera Xabier Arzalluz pretende que el Gobierno financie la construcción de autovías en la comisa cantábrica y ceda la concesión de la Bilbao-Behobia, el año 2003, a las diputaciones vascas.

Anasagasti fue muy explícito ayer al señalar que, aunque no hay acuerdo definitivo sobre los Presupuestos, reconoce el "esfuerzo extraordinario de Álvarez Cascos para que funcione la relación con el vicepresidente segundo del Gobierno".

También el miércoles a última hora y, ayer, jueves, Rato intensificó sus contactos con el portavoz de CiU, Joaquim Molins. En la reunión que mantuvo la noche del miércoles Rato con Molins estuvo presente, en algunos momentos, el presidente José María Aznar, quien ayer conversó por teléfono con Jordi Pujol. Hasta última hora de ayer continuaron los contactos entre Rato, Álvarez Cascos y Molins.