Indignación en el PNV por la "desvergüenza" con que el PP se aproyechó del hombre Blanco

Las críticas contra el PP y el Gobierno por haberse apropiado del homenaje que RTVE organizó en memoria del concejal Miguel Angel Blanco, asesinado por ETA, subieron ayer de tono con la entrada en escena del Partido Nacionalista Vasco. El propio lehendakari, José Antonio Ardanza, expresó abiertamente su indignación porque, en su criterio, el concierto de la plaza de toros de Las Ventas fue "una vergüenza y un aprovechamiento desvergonzado político". El presidente vasco se sumó sin disimulo a los duos reproches formulados la víspera por los partidos políticos y las asociaciones pacifistas contra el Ejecutivo de José María Aznar. El PNV no está "en absoluto de acuerdo" con un acto al que tacha de "manipulación partidista". Los populares, sin embargo, se atrincheran en defender el éxito, "cierto y objetivo", del acontecimiento.

Ardanza se desmelenó en Radio Euskadi, la radio pública vasca. Cuidadoso en otras ocasiones con el tono empleado en sus declaraciones, el lehendakari arremetió esta vez contra la utilización partidista que el PP realiza del asesinato del edil de su partido Miguel Angel Blanco. Ardanza casi se alegró de que lo ocurrido el martes en Las Ventas haya servido para que "las vendas caigan de otras caras", en alusión a las declaraciones críticas que dirigentes del PSE-EE y de IU habían hecho contra el PNV por su ambiguëdad ante el terrorismo de ETA."Desde julio y agosto se han dedicado sin derecho al linchamiento del nacionalismo y nos han dejado solos, pero ahora, cuando el Partido Socialista ve que el espíritu de Ermua es el show de Las Ventas, les duele porque también les ha afectado a ellos", manifestó Ardanza.

Si el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, llegó a remarcar que "eso de ver a Rocío Jurado" a él no le iba nada -"aunque es muy respetable la señora", comentó-, Ardanza no tuvo reparos en asegurar que "ver a los grandes prebostes de la política bailando macarenas es una vergüenza que pensaba que sólo ocurría en repúblicas bananeras".

Sobre los abucheos al cantautor Raimon por interpretar una canción en catalán el lehendakari se queda con "la impresión de que hay cosas no superadas y que afloran los sentimientos nacionalistas españoles. Espero que ahora lo magnifiquen igual que con lo ocurrido en el udaleku de Zeanuri", el campamento de verano en Vizcaya en el que los monitores, como castigo, obligaron a los niños a portar una mochila con piedras por hablar en castellano.

El presidente del PNV, por su parte, añadió que los abucheos "de un grupo importante de gente" a Raimon reflejan "cómo está el tema de la tolerancia y la libertad en este país", y adjetivó esos comportamientos como algo "desagradable".

Arzalluz avanzó su valoración política del significado de la campaña popular contra ETA y su entorno basada en el "movimiento continuo" y en el denominado espíritu de Ermua, que el PP, dijo, ha puesto en marcha desde que fue asesinado Miguel Ángel Blanco. A su juicio, es "contraproducente" dejar en el pueblo la "responsabilidad y el ahogo" de un fenómeno como el terrorismo de ETA. Y subrayó que son los políticos y no el pueblo los responsables de dar una solución al fenómeno de la violencia. Arzalluz advirtió, preocupado, que "hay que tener ojo" Porque desde "un determinado partido" y "determinados líderes, a cuenta de este caso" y apelando al espíritu de Ermua, "se quiere llevar a cabo una psicología social y cargar al pueblo el ahogo de un fenómeno".

En contraste con el aluvión de críticas contra el PP llegadas tanto desde los partidos como desde las asociaciones pacifistas, se alzó ayer la voz de Ruben Múgica, uno de los hijos del Fernando Múgica, dirigente socialista asesinado por el comando Donosti. "Se ha organizado una polémica estéril que sólo beneficia a los nazis vascos", dijo en alusión a ETA y su entorno civil. Tampoco el coordinador general del Partido Popular, Ángel Acebes, considera lógicas las críticas ni que RTVE "tenga que pedir perdón", dijo, por haber organizado y montado "el programa más visto del año", al que definió, además, como "un éxito cierto y objetivo".

Por contra, la diputada y portavoz en el Congreso de Eusko Alkartasuna, Begoña Lasagabáster, presente en Las Ventas el miércoles, se adhirió a las quejas generales contra el PP y contra el presunto "barniz centrista del que presumían". Lasagabáster expresó así lo que observó esa noche: "Lo que yo vi no era centrista, era absolutamente de derechas, en el peor sentido de la palabra. Pensaba que este tipo de actitudes eran minoritarias. Una se sorprende cuando se encuentra a gente que cree que en España no hubo dictadura de Franco, que no quiere que se hable catalán, y que es fascista y nada democrática".