La OTAN simula un bloqueo de la flota rusa en las aguas de Crimea

Comienzan hoy las maniobras de la OTAN frente a las costas de Crimea, a pesar de la oposición de los habitantes de esta península ucrania, que en su aplastante mayoría son rusohablantes, y de los esfuerzos hechos por el Kremlin para impedirlas. Se trata del primer evento político-militar que demuestra cuál es la nueva situación geopolítica nacida tras la expansión de la Alianza hacia el Este y que ha puesto a prueba las relaciones entre Moscú y Bruselas. Las maniobras Sea Breeze-97 son un simulacro de un bloqueo de la flota rusa del Mar Negro.El guión original de Sea Breeze-97 era aún peor, era abiertamente provocador para Rusia: ante una sublevación de unos separatistas de una península apoyados por un poderoso país vecino, las autoridades pedían ayuda a las fuerzas multinacionales de la OTAN. Naturalmente, que donde había un artículo indeterminado todos leían uno determinado: los separatistas rusohablantes de la península de Crimea apoyados por la vecina Rusia se sublevaban y eran aplastados por las tropas de la Alianza Atlántica.

Este guión fue reemplazado, después de una serie de duras declaraciones del ministro de Exteriores ruso, Yevgueni Primakov, por otro de apariencia inofensiva: un terremoto y el desembarco posterior de tropas multinacionales para terminar con los desórdenes estallados después de. la catástrofe natural y evacuar a parte de los habitantes.

El problema turco

El cambio no ocurrió, como alguien podría pensar, a iniciativa de Ucrania. La decisión de modificar el plan fue tomada por Washington al término de una de la últimas reuniones de Primakov con su colega estadounidense, Madeleine Albright. Esto es indudablemente un éxito para la diplomacia rusa, pero no significa que el Kremlin esté de acuerdo con las maniobras. Simplemente no puede estarlo, aunque no sea más que porque en ellas participa Turquía, su principal rival en el mar Negro, pero además porque las maniobras no son tan inofensivas como parecen: ensayan un plan de bloqueo de la península, que, como bien sabemos, es la sede principal de la flota del mar Negro rusa.

Después de la desintegración de la URSS, Moscú ha dejado de ser la principal fuerza naval en el mar Negro. Ahora la correlación de fuerzas entre Rusia y Turquía es allí de 2,5 a 1 a favor de esta última, y en los próximos años la ventaja de Ankara seguramente aumentará. Los turcos ya han aprobado un plan de construcción de buques hasta el 2005, mientras que los rusos, debido a su precaria situación económica, no podrán aumentar su número.

La población de Crimea está en contra de estas maniobras y diversas organizaciones locales han 'organizado actos de protesta. El primero de ellos transcurrió el viernes en la plaza central de Eupatoria, y durante todos los días de la Sea Breeze-97, que durarán hasta el domingo, habrá piquetes de protesta.