La policía alemana consigue evitar la conmemoración de la muerte de Hess

La policía alemana consiguió ayer, con la detención de más de 400 neonazis a lo largo del fin de semana, impedir la celebración por parte de los ultraderechistas del 10º aniversario de la muerte de Rudolf Hess, el delfín de Hitler. Con un despliegue impresionante de fuerzas de seguridad en todo el país, los agentes se las vieron y desearon para ir atrapando en distintas localidades a unos extremistas que habían mantenido en secreto sus planes de manifestación.En la vecina Dinamarca, donde una mayor libertad de expresión suele concentrar a nazis de diversos países, unos 150 escandinavos, holandeses y alemanes consiguieron corear sus consignas, aunque más de 40, entre manifestantes y contramanifestantes, también dieron con sus huesos en las comisarías.

El Tribunal Constitucional de Alemania confirmó ayer la prohibición de celebrar en Wunsiedel (Baviera), pueblo natal de Rudolf Hess, el aniversario de su suicidio, a los 93 años, en la cárlcel berlinesa de Spandau.

En Austria, por otra parte, un grupo de desconocidos atacó ayer el monumento conmemorativo de las víctimas de las guerras mundiales en Ulrichsberg, informa la agencia Efe. Un grupo de extrema derecha conocido como Comando ZALA reivindicó el acto.