El Reino Unido impide divulgar nombres de pederastas

El Gobierno británico dotó ayer a la policía de un código de conducta que incluye rigurosas restricciones a la divulgación de la identidad de pederastas considerados peligrosos: el objetivo es impedir que los sospechosos inicien acciones de autodefensa o pasen a la clandestinidad.El nuevo reglamento, que entrará en vigor en septiembre, ha sido bien acogido por las asociaciones protectoras de menores y por los juristas. "El Gobierno acierta al excluir una denuncia sistemática a la americana, que lleva a acciones de autodefensa", opina Paul Cavadino, presidente de una asociación de reinserción. Al hacer de la revelación de la identidad una excepción y no la regla, el Gobierno aspira a evitar que los pederastas, "temiendo por su seguridad, se oculte, y aumente así el peligro de que reincidan", señala un portavoz judicial.

Se abrirá también un fichero con los 9.000 condenados por crímenes sexuales. Los ciudadanos privados, por ejemplo los empresarios, sólo podrán acceder a ese fichero bajo orden judicial.

"Ha habido casos de inocentes que se han visto atacados en base a informaciones incompletas o mal entendidas", recuerda el secretario de Estado de Interior, Alun Michal. "Hay presiones del público, muy comprensibles, por una información más amplia", dice Tony Butler, representante policial, "pero lo importante es juzgar cada caso".

De acuerdo con el poder judicial y con los psquiatras, la policía podrá alertar a los responsables de escuelas y organizaciones juveniles sobre la presencia en la vecindad de un pederasta.