Musulmanes y hebreos logran apoyo regional en asuntos sociales y culturales

Las comunidades hebrea y musulmana de Madrid lograrán en septiembre una de sus reivindicaciones históricas: que el Gobierno regional del PP firme con ellos un convenio de colaboración en temas sociales y culturales como los que ya existen con católicos y protestantes. Así lo manifestó ayer el consejero de la Presidencia, Jesús Pedroche, durante su asistencia al acto de clausura del master sobre Cultura Hispánica que se ha celebrado en la Universidad de Alcalá de Henares.Representantes de ambos credos presentaron hace unos meses su propuesta de convenio al ejecutivo presidido por Ruiz-Gallardón. En 1995 la Comunidad llegó a un acuerdo global con el Consejo Evangélico, que ahora debe desarrollarse en un programa de rehabilitación de edificios protestantes.

La Unión de Comunidades Islámicas de España (UCIDE), en su borrador de convenio, solicita que se cuente con ellos para elaborar planes de apoyo social a colectivos con fuerte presencia islámica, como el de los inmigrantes. También pide la apertura de comedores y albergues con comida halal (sin alcohol y con reses sacrificadas según el islam).

Asimismo solicitan la cesión de suelos públicos para construir mezquitas y cementerios islámicos (el único está en Griñón) y ayudas para la conservación del patrimonio monumental, como la muralla árabe de Madrid o el castillo de Torrelodones.

Pedroche asegura que en el convenio con el colectivo musulmán se prestará especial atención a los programas sociales para inmigrantes magrebíes, con la apertura de guarderías y talleres, y planes contra el fracaso y el absentismo escolar de los niños.

En el acuerdo con la comunidad hebrea se establecerá que se evite la convocatoria de exámenes finales o de selectividad en colegios y universidades durante festividades como el Rosh Hashaná o Yom Kippur (ambas en el mes judío de tishri, entre septiembre y octubre) y el shabbat o sábado de descanso.

En Madrid, según la UCIDE, viven de 80.000 a 100.000 musulmanes; unos 40.000 protestantes, según el Consejo Evangélico, y 2.800 judíos sólo en la capital.