Sudán sufre el peor brote de la enfermedad del sueño

El sur de Sudán sufre la peor epidemia del siglo de la enfermedad del sueño, según evaluaciones sobre el terreno de la ONG Care y del Centro de Control de Enfermedades (CCE) radicado en Estados Unidos. La situación es calificada por estos organismos de "catastrófica".La epidemia se extiende ayudada por la guerra civil que desde hace décadas afecta a la región y provoca masivas huídas de población. "El brote alcanza los niveles más altos", dice un informe de Anne More, responsable del CCE.

El estudio se basa en dos semanas del pasado mayo, según el cual en cada aldea analizada se encontraró "el doble" de casos que 10 años antes. El informe no pudo completarse por la inseguridad en la zona.

La enfermedad, que hace que literalmente las personas caigan en un sopor que desemboca en la muerte, es expandida por la mosca tsé-tsé. Controlar a este insecto es relativamente fácil, pero el tratamiento de la epidemia es arriesgado y caro, señala el informe.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Añadir usuario Continuar leyendo aquí

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.