Sobre El Paular
Leo un reportaje acerca del plan de restauración del monasterio de El Paular, en mi opinión el monumento monástico-más importante del área madrileña. Como miembro de la Asociación de Amigos de El Paular y visitante asiduo de ese lugar, deseo únicamente llamar la atención sobre las preferencias que debe llevar el plan restaurados.Desde 1956 se encuentra establecida en ese cenobio una comunidad benedictina que, con enorme esfuerzo y sacrificio, viene consiguiendo la lenta recuperación, ahora un tanto continuada, del monumento. De no ser por la presencia discreta pero vigilante de estos monjes, El Paular estaría probablemente en la más absoluta de las ruinas.
Todo esto lo expongo para indicar que el estado en que se hallan las habitaciones y otras dependencias donde viven los monjes es tan precario que no lo querrían para sí muchos habitantes de áreas suburbanas.
Por ello, como acto de justa correspondencia a la entrega de estas personas para mantener la vida y restauración de El Paular, considero necesario situar entre los primeros pasos del plan de reedificación las celdas, dotándolas de las condiciones que, dentro de la austeridad monástica, las hacen compatibles con las elementales exigencias de habitabilidad e higiene de estos tiempos.
De ello hay muestras en otros monasterios, pero al ser éste de propiedad pública y no de la orden benedictina, no depende de los monjes establecer prioridades ni pueden hacerlo por sí mismos. Tampoco la Asociación de Amigos puede hacer más que ayudar para que se active la recuperación. Tal vez un segundo reportaje del diario de su dirección podría ser un acicate para conseguir este objetivo.-
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