No habrá vencedores ni vencidos según Solana

El secretario general de la OTAN, Javier Solana, garantizó ayer una cumbre! de Madrid sin vencedores ni vencidos. Tras entrevistarse en la Moncloa con el presidente del Gobierno, José María Aznar, Solana declaró que tiene la certeza de que los 16 jefes de Estado y de Gobierno alcanzarán un consenso sobre la. ampliación de la alianza que permitirá que la cumbre del próximo martes entre los libros de Historia. "Madrid no es un punto de llegada, es un punto de partida, donde se van a sentar las bases de una nueva Alianza para una nueva Europa". La previsible invitación a tres países -Hungría, Polonia y la República Checa- se ampliará a otros países tras una próxima cumbre, en 1999, cuando la alianza cumpla su 50 aniversario.

En la cumbre de Madrid la OTAN se plantea un doble reto: cambiar su estructura para adaptarla a los cambios que se han registrado tras el derrumbe de la Unión Soviética y sentar las bases para garantizar la seguridad en el continente para el próximo siglo. "No vamos a crear nuevas divisiones en Europa, sino que vamos a borrarlas", declaró ayer Solana al ser preguntado por los planes de expansión de la Alianza.Doce países han pedido su ingreso en la OTAN, pero sólo tres -Hungría, la República Checa y Polonia- tienen el respaldo de todos los socios para ingresar en este momento. Francia, apoyada formalmente por sus socios mediterráneos, ha apoyado, sin demasiado éxito, la candidatura de Rumanía y Eslovenia. EE UU, principal contribuyente de la Alianza, ya ha anunciado que por el momento sólo puede asumir una ampliación limitada a tres socios.

Solana aseguró ayer que no estaba decidido si serán tres, cuatro o cinco los países que serán invitados a negociar su incorporación. "Habrá un debate profundo, porque no hay nada precocinado", señaló.

El secretario general dijo que al término del proceso de incorporación de los países que sean invitados, -incluida la ratificación parlamentaria en todos los Estados miembros-, que situó en 1999, recomendará una nueva cumbre que podría dar un nuevo paso en la ampliación.

Su visita a La Moncloa forma parte de los contactos que el secretario general de la OTAN mantiene con todos los jefes de Estado y de Gobierno en vísperas de la cumbre que los próximos martes y miércoles consagrará la ampliación, y en la que se formalizará la constitución de un nuevo foro de seguridad: el Consejo Euroatlántico, que reunirá a 28 países del este europeo, de la zona del Cáucaso, y de, la zona asiática de la desaparecida Unión Soviética, con los países de la OTAN para discutir sobre la seguridad del continente.

Javier Solana manifestó que los aliados "tomarán nota" de la marcha de la reforma interna de la organización que, según fuentes diplomáticas no estará cerrada hasta diciembre. La nueva estructura militar, que debería haber estado lista para esta cumbre, ha topado con más dificultades de las previstas, sobre todo en el Mediterráneo oriental entre griegos y turcos, y en la pretensión francesa de que un europeo se hiciera cargo del mando sur de la OTAN, lo que ha encontrado el veto de EE UU.

Preguntado por la posición española, Solana señaló que se han cumplido el 90% de las reivindicaciones planteadas por el Gobierno español, y que la nueva estructura militar va en la dirección que quiere España. Madrid ha pedido contar con un mando subregional combinado y conjunto con jurisdicción sobre todo el territorio nacional, incluido el archipiélago canario. La polémica con el mando atlántico situado en Oeiras (Portugal) I)or el control estratégico de las aguas que separan Canarias de la Península, se saldará previsiblemente con alguna fórmula de compromiso, que aunque mantenga las aguas bajo el control del mando atlántico, ponga el énfasis en la cooperación y coordinación con el mando europeo sobre esas aguas. Solana no quiso entrar en detalles sobre la posición española, y señaló que se había limitado a informar al presidente Aznar del estado de las negociaciones sobre la estructura militar. Solana destacó la importancia del acuerdo sobre una relación especial con Ucrania, "país clave para la estabilidad de Europa'.' que se firmará el miércoles y que será similar al suscrito el pasado mes de mayo con la Federación Rusa.